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Río de Janeiro prohibe el uso de Uber
Miércoles, Septiembre 30, 2015 - 16:50

Los conductores de Uber que violen la prohibición pueden ser sancionados con multas cercanas a US$500.

La ciudad sede de los Juegos Olímpicos de verano del próximo año se convirtió en la primera en Brasil que prohíbe el uso de aplicaciones de compartición de vehículo para teléfonos multifuncionales, como Uber.

Eduardo Paes, alcalde de Río de Janeiro, firmó el martes una legislación aprobada recientemente por el concejo municipal de la ciudad prohibiendo que el servicio de Uber y tecnologías similares operen en la entidad.

"Uber está prohibido", dijo Paes después de firmar la ley. "Estamos abiertos a discutir el asunto, pero está prohibido".

Los conductores de Uber que violen la prohibición pueden ser sancionados con multas cercanas a US$500.

"Es un día triste para Río", dijo Uber en un comunicado. "Para complacer a propietarios de taxis en la ciudad, el alcalde Paes oficializó una ley totalmente inconstitucional para prohibir tecnología a la ciudad, dejando a los cariocas (residentes de Río de Janeiro) con menos opciones para transportarse", agregó la compañía, la cual señaló que estudia posibles acciones jurídicas.

En la ciudad más grande de Brasil, el concejo municipal de Sao Paulo también aprobó recientemente una legislación prohibiendo Uber, pero el alcalde Fernando Haddad aún no la ha firmado o vetado.

Haddad dijo a la cadena de televisión Globo que quiere encontrar un "punto intermedio" para tratar el asunto.

"No estamos pensando únicamente sobre Uber; estamos pensando en maneras de incluir estas nuevas tecnologías en las regulaciones de nuestra ciudad", señaló.

Uber ha tenido un uso creciente en Brasil desde la Copa Mundial de fútbol del año pasado; sus automóviles son más nuevos y limpios que los taxis regulares.

Los conductores de taxis se quejan de que Uber es una competencia injusta.

"Son una multinacional que no paga impuestos; ¿cómo podemos competir con eso?", dijo Elizeu Soares, de 54 años, conductor de taxi en Río de Janeiro. "Nosotros pasamos por inspecciones; ellos no. Nosotros tenemos que pagar documentos específicos; ellos no.

Autores

Reuters