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Sindicatos franceses critican a Hollande por el acuerdo con ArcelorMittal
Domingo, Diciembre 2, 2012 - 09:01

Los trabajadores están molestos debido a que las calderas seguirán paralizadas en lugar de reabrirse y expresaron sus dudas sobre la promesa de la empresa de ofrecer cargos alternativos o paquetes de jubilación anticipada.

Los sindicatos franceses acusaron este sábado al presidente Francois Hollande de traición, después de que su Gobierno se retractó de la amenaza de nacionalizar la siderúrgica Florange de ArcelorMittal.

El Gobierno socialista dijo este viernes que consiguió promesas de ArcelorMittal para evitar jubilaciones obligadas e inyectar 180 millones de euros para desarrollar la planta Florange, lo que significa que ya no tendrá que asumir el control de la instalación.

Hollande llegó al poder con la promesa de crear empleos y mantener abiertas dos calderas en la planta del norte de Francia que ArcelorMittal dice que no son viables en el sector acerero europeo, que sufre de un exceso de capacidad.

ArcelorMittal confirmó los detalles del acuerdo este sábado, diciendo que negociaría un acuerdo de jubilación voluntaria con los sindicatos.

Los trabajadores están molestos debido a que las calderas seguirán paralizadas en lugar de reabrirse y expresaron sus dudas sobre la promesa de ArcelorMittal de ofrecer cargos alternativos o paquetes de jubilación anticipada a los 630 trabajadores afectados.

"Estamos en pie de guerra", dijo Edouard Martin, jefe del capítulo Florange del sindicato CFDT, a la cadena i

"Hemos visto las promesas del señor (Lakshmi) Mittal en el pasado y lo que ha ocurrido con ellas -nada- así que no vamos a permitir que ocurra algo sin dar pelea", agregó.

Martin dijo que el sindicato había sido una "pesadilla" para el ex presidente Nicolas Sarkozy en el pasado por sus antecedentes en el sector laboral, que según analistas fue un factor en su derrota en la elección de mayo, y que pronto podría convertirse en una para Hollande.

ArcelorMittal rechaza las acusaciones de que ha roto promesas en un país donde emplea a 20.000 personas en varias plantas.

El grupo provocó la ira de los sindicatos en 2009 cuando cerró la cercana acerería Gandrange y despidió a unos 500 trabajadores. Sarkozy había prometido que mantendría la planta abierta.

El primer ministro de Francia defendió el acuerdo sobre Florange.

"El primer ministro mantendrá una observación cercana para garantizar que las promesas hechas ayer por el grupo se cumplan", dijo Jean-Marc Ayrault en un comunicado.

"Ellas son incondicionales y el Gobierno utilizará todos los medios legales a su disposición en caso de que no sean respetadas", agregó.

Los sindicatos dicen que modernizar Florange requiere de unos 400 millones de euros en financiamiento de la Unión Europea, además de los compromisos de ArcelorMittal, dinero que aún debe ser ofrecido.

Autores

Reuters