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Sistema eléctrico de Honduras es el peor evaluado de Centroamérica
Lunes, Septiembre 12, 2011 - 05:28

El sistema eléctrico hondureño es uno de los que presenta peores índices de eficacia en esta región, según informes dados a conocer por la Cooperación Europea, por medio del proyecto GAUREE II.

Tegucigalpa. Honduras registra las pérdidas más altas de energía eléctrica en toda la región centroamericana.

La ineficiencia de la estatal supera las fronteras regionales, según informes dados a conocer por la Cooperación Europea, por medio del proyecto Gauree II.

El sistema eléctrico hondureño es uno de los que presenta peores índices de eficacia en Centroamérica.

Una situación que lejos de mejorar sigue empeorando ante la falta de decisiones que vayan mas allá del simple maquillaje, recalca el estudio.

La energía puesta en el sistema (ventas más pérdidas) durante el periodo 2000-2009 ha crecido en Honduras en un 63%, mientras que en la mayor parte de los países de Centroamérica solo ha crecido entre 41% y 51%.

Honduras, además, presenta un mayor incremento de la demanda máxima respecto al crecimiento del PIB, 158% comprado a un 102% de incremento de la media de la región.

Si Honduras hubiera experimentado un crecimiento similar a la media tendría en la actualidad 179 MW, un 14,9% menos de demanda máxima.

En diciembre de 2010, las pérdidas representaban 24,2% de la energía puesta en el sistema, aceptando como válidas las estimaciones realizadas en 2005 que consideraban las pérdidas técnicas de 12,5% y el 11% restante correspondería a pérdidas no técnicas como hurto de energía o energía no facturada por falta de medidores.

El reglamento de la Ley Marco del Subsector Eléctrico establece un nivel máximo de pérdidas del 15%, el que debería considerarse el objetivo a alcanzar.

El exceso de pérdidas se cuantifica en 621 GWH por año, por el que la ENEE estaría dejando de percibir anualmente US$95,2 millones.

El ránking. El aumento en la demanda y la falta de inversión en infraestructura son los detonantes de la crisis energética que vive el país. Si en Honduras la demanda máxima hubiese seguido un crecimiento similar al del promedio de los países vecinos, alrededor de 102%, sería de 179 MW inferior a las actuales, lo cual hubiese permitido retirar las plantas cuyo contrato expiraba en 2009 y que ha sido imposible rescindir debido a la discusión sobre la capacidad disponible.

Un factor esencial para el análisis de la eficiencia de los sistemas eléctricos son las pérdidas totales del sistema, calculadas con la suma de pérdidas técnicas y no técnicas.

En el tema de las pérdidas, Honduras tiene una situación que se fue deteriorando desde finales de 2008.

A diciembre de 2010, los datos indican que un 24,2% de las pérdidas en Honduras dejaban al país con el índice de pérdidas más elevado de la región.

Para el caso, Guatemala (con una extensión territorial muy similar a la de Honduras y más densamente poblado) apenas presenta un porcentaje de pérdidas de 12,8%.

El Salvador (con un sexto de la extensión de Honduras y una densidad de población mayor casi cuatro veces) presenta un porcentaje de 11,5%.

En Honduras el valor máximo de pérdidas globales razonables sería de 15%, según se ha admitido en estudios del Banco Mundial y el reglamento de la Ley Marco del Subsector Eléctrico. En países desarrollados los niveles de pérdidas son muy inferiores: 4,6% Alemania, 6,2% en EE UU, 5,6% en Francia, 6,8% en Italia, 4,5% en Japón y 5% en España.

El último esfuerzo realizado para controlar las pérdidas no técnicas fue en 2007-2008 cuando se instalaron 45.000 medidores en abonados ya reconocidos por la ENEE.

Ante este panorama sobre las pérdidas técnicas y no técnicas, el gerente de Planificación de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica, Gerardo Salgado, dijo que “con el BID estamos llegando a acuerdos para inversiones en subestaciones y tenemos que buscar recursos para un plan tan ambicioso que aumente en un 50% las líneas de transmisión de las subestaciones con que cuenta el país.

Podemos hacer uso de todas las nuevas disposiciones del Congreso Nacional como la Ley de Inversiones Público-Privadas”.

Nuevas fallas. Sobre el informe que presentó el Sindicato de Trabajadores de la ENEE al respecto de la fallas que se reportan en la subestación de Miraflores, Salgado dijo que no es motivo de alarma para la población.

“No hay que ser alarmistas, hay que ver el tema de Miraflores como cualquier dispositivo que está sujeto a fallas.

Si el sindicato está haciendo el llamado es porque se hacen las inspecciones, las verificaciones y se encontraron las fallas, es parte de la labor normal de la empresa”.

De acuerdo con el funcionario, el tema de subestaciones y líneas de transmisión fue presentado ante el Congreso Nacional de forma detallada, con una descripción de montos y localización geográfica de las subestaciones que se necesitan, “además otro tema que nos afecta es la mora -que supera los 2.700 millones de lempiras- y se viene arrastrando desde hace más de diez años”, dijo Salgado.

Autores

ElHeraldo.hn