La mayor automotriz mundial reportó una caída inferior a la prevista en su utilidad del tercer trimestre y mejoró su pronóstico de despachos para el año fiscal que culmina el 31 de marzo a 7,48 millones de vehículos, gracias al impulso de Asia, Japón y Rusia.
Toyota mejoró su previsión anual de ganancias más allá de las expectativas del mercado porque los recortes de costos y las ventas excedieron sus previsiones, pero la fuerte dependencia en las exportaciones seguirá pesando en sus resultados por la fortaleza del yen.
La mayor automotriz mundial reportó una caída inferior a la prevista en su utilidad del tercer trimestre y mejoró su pronóstico de despachos para el año fiscal que culmina el 31 de marzo a 7,48 millones de vehículos, gracias al impulso de Asia, Japón y Rusia.
La firma no varió sus pronósticos para Norteamérica, no obstante, porque aún persiste la incertidumbre por el impacto de los millones de autos que debió retirar en ese mercado por fallas mecánicas.
Además, espera que las pérdidas en sus operaciones japonesas continúen.
"Frente a otras automotrices japonesa, Toyota tiene una mayor exposición al mercado doméstico y por tanto es más susceptible al impacto negativo del lento crecimiento económico del país", dijo Kazuyuki Terao, jefe de inversión de RCM Japan en Tokio.
Toyota, que se mantuvo por delante de General Motors como la mayor automotriz mundial aunque por un menor margen, mejoró su previsión de utilidades operacionales para el año a 550.000 millones de yenes (6.700 millones de dólares) desde 380.000 millones de yenes.
Esa previsión está muy por encima del consenso de 489.000 millones de yenes de un sondeo entre 23 analistas.
Toyota espera que los recortes de costos sumen 170.000 millones de yenes a su beneficio operacional anual, 30.000 millones de yenes más de los anticipados hace tres meses.
Además espera ahorrar 20.000 millones de yenes con el recorte en investigación y desarrollo y en otros gastos.
"Nuestros esfuerzos de mejorar nuestra rentabilidad dieron fruto más rápido de lo que esperábamos", dijo el director senior Takahiko Ijichi durante una conferencia de prensa.
"Nuestro punto de equilibrio indudablemente ha caído y nuestro poder de ganancias está mejorando gradualmente", agregó.
Los beneficios operacionales de Toyota en el periodo octubre-diciembre fueron de 99.070 millones de yenes, desde los 189.100 millones del mismo trimestre del año anterior, mientras que la ganancia neta cayó un 38,9 por ciento, a 93.630 millones de yenes.
Nueve analistas encuestados por Reuters habían calculado en promedio que Toyota tendría beneficios operacionales de 70.600 millones de yenes.
Las acciones de Toyota han subido un 18 por ciento en los últimos tres meses frente a la ganancia de un 13 por ciento en el índice general TOPIX de Tokio. Las de Honda ganaron un 22 por ciento y las de Nissan un 13 por ciento.
