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Venezuela busca inversiones estadounidenses en faja petrolera
Jueves, Abril 15, 2010 - 17:57

El ministro de Energía dijo que su país está suscribiendo acuerdos con firmas de Rusia, China, Europa y Japón, y animó a las compañías de Estados Unidos a unirse al plan de desarrollo de la Faja del Orinoco.

Washington. El ministro de Energía de Venezuela, Rafael Ramírez, abrió los brazos a la inversión de petroleras estadounidenses para desarrollar las vastas reservas de crudo de su país, mientras asistía en Washington a una reunión sobre el sector por primera vez en seis años.

Ramírez dijo que Venezuela está suscribiendo acuerdos con compañías de Rusia, China, Europa y Japón para explotar sus yacimientos y animó a las compañías de Estados Unidos a unirse al plan de desarrollo de la Faja del Orinoco, donde yacen unas de las mayores reservas mundiales de hidrocarburos.

"Estados Unidos no puede dejar pasar esta oportunidad", dijo a periodistas al margen de una conferencia de países occidentales para discutir cuestiones de energía y cambio climático.

Las relaciones entre Washington y Caracas han estado crispadas desde hace mucho tiempo, y tocaron uno de sus puntos más bajos cuando el presidente Hugo Chávez llamó "diablo" al mandatario estadounidense de entonces, George W. Bush, en la Asamblea General de Naciones Unidas.

Ramírez dijo que las petroleras extranjeras que quieran hacer negocios en Venezuela deben tener "respeto" por las leyes y la política energética del país.

Venezuela tiene reservas probadas estimadas de 99.400 millones de barriles, siendo el octavo exportador mundial de petróleo y el cuarto proveedor externo del mercado estadounidense.

Según cifras oficiales, Venezuela bombeó un promedio de 3,04 millones de barriles por día (bpd) en el 2009, aunque la Administración de Información de Energía estadounidense la ubicó en 2,2 millones de bpd, lo que supone una caída de 190.000 bpd respecto al año previo.

Más recursos. El país caribeño necesita inversión extranjera para impulsar la declinante producción de sus pozos convencionales y explotar los campos de crudo pesado de la Faja, que requiere procesarse en costosos mejoradores para convertirse en petróleo más liviano que pueda ser exportado.

Venezuela ha sido criticado años atrás por forzar a las compañías extranjeras a renegociar sus contratos petroleros, lo que redujo sus ganancias.

Los pesos pesados estadounidenses Exxon Mobil y ConocoPhillips abandonaron Venezuela en el 2007 al rechazar las nuevas condiciones impuestas a los proyectos del Orinoco, en los que la estatal Pdvsa pasó a tener la mayoría accionaria tras su nacionalización.

Sin embargo, la mayoría de las firmas decidieron permanecer como socias minoritarias de Pdvsa, incluyendo la estadounidense Chevron, la británica BP y la francesa Total.

Chevron incluso lideró uno de los consorcios que en enero se adjudicaron proyectos en la Faja en la primera licitación que abrió Venezuela desde que Chávez llegó al poder en 1999.

Ramírez, quien no participaba de discusiones sobre energía en Washington desde el 2004, dijo que las relaciones entre Venezuela y Estados Unidos habían sido dañadas por el gobierno de Bush, al que definió como "hostil" a su país.

"No hay ninguna razón en absoluto para que esta relación haya sido interrumpida", señaló el funcionario, quien agregó que esperaba tener una reunión privada con su contraparte estadounidense, el secretario de Energía, Steven Chu, durante la conferencia.

La OPEP. En cuanto a los mercados petroleros, Ramírez dijo que los países exportadores de la OPEP no aumentarán su producción para bajar los costos, incluso pese a que los precios del crudo rondan actualmente máximos de 18 meses, dijo el jueves el ministro de Energía de Venezuela, Rafael Ramírez.

Los inventarios globales de petróleo están "muy altos" debido a la baja demanda, dijo Ramírez a reporteros. Cualquier producción adicional de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) acabaría en inventarios y no irían a satisfacer demanda de los consumidores, aseguró.

"En la medida en que no haya un aumento robusto de la demanda no habrá incrementos en la oferta", dijo Ramírez, quien asiste a una cumbre de energía y clima en Estados Unidos.

Ramírez evitó las preguntas sobre si los precios del petróleo por encima de US$80 a US$90 por barril afectaría el crecimiento económico mundial, señalando que los altos valores eran causados por inversores que apostaban al precio en el mercado.

"El precio actual es resultado de la especulación en los mercados petroleros", dijo Ramírez.

Los valores del crudo operaban cerca de los 86 dólares por barril el jueves por sólidos datos económicos de China, un dólar débil y una inesperada caída en los inventarios de petróleo en Estados Unidos.

Los precios actuales están por encima del rango de US$70 a US$80 que los ministros de la OPEP dijeron el mes pasado es bueno tanto para productores como consumidores.