Según el texto aprobado, "la Cámara de las Regiones es un órgano deliberativo, paritario y plurinacional de representación regional encargado de concurrir a la formación de las leyes de acuerdo regional".
Una larga sesión se vivió este miércoles en la Convención Constitucional de Chile, que redacta la nueva Carta Magna. El pleno del órgano aprobó gran parte de las normas del Poder Ejecutivo, pero esta suerte no la vivió el Legislativo que dejará de contar con el Senado tras 200 años y será sustituido por una Cámara de las Regiones.
El informe que votó el pleno fue redactado tras un acuerdo al que llegó la izquierda, donde planteaba un presidencialismo atenuado -que sí se respetó- y un bicameralismo asimétrico.
De esta forma se aprobó un artículo que contempla el concepto de Congreso de Diputadas y Diputados, que tendría un rol fiscalizador, aunque sus atribuciones aún no están definidas.
Posteriormente, aprobó la creación de una Cámara de las Regiones, que acompañará al Congreso. De esta forma se consagró la eliminación del Senado, lo que fue celebrado por gran parte de quienes firmaron el acuerdo.
Según el texto aprobado, "la Cámara de las Regiones es un órgano deliberativo, paritario y plurinacional de representación regional encargado de concurrir a la formación de las leyes de acuerdo regional".
No hubo votos para aprobar atribuciones
Fue una sesión larga, donde el momento crucial se vivió al inicio de las votaciones, cerca de las 15:30 horas, cuando los convencionales se pronunciaron respecto al artículo 28, un punto clave.
La norma establecía las atribuciones de la Cámara de las Regiones. Sin embargo, fue rechazada por muy pocos votos.
Algunos constituyentes de INN se abstuvieron o rechazaron, mientras que el convencional de CS, Patricio Fernández, decidió votar en contra. Esto tomó por sorpresa al FA y al PC, que pensaban se iba a aprobar. Faltó un solo voto, y algunos constituyentes no pudieron conectarse al sistema de votación online.
El Ejecutivo se pronunció sobre esta materia, y en voz del ministro de la Secretaría de la Presidencia, Giorgio Jackson, se mostraron esperanzados en que las conversaciones finalmente contarán con humo blanco.
Las caras largas no se hicieron esperar en el propio Senado.El presidente de la Cámara Alta, Álvaro Elizalde, puso en duda la forma en que se votó el informe, mientras que desde la derecha apuntaron sus dardos contra el Gobierno.
El jefe de bancada de la UDI, senador Iván Moreira, acusó que esta votación le favorece al Gobierno, ya que no tienen mayoría en el Senado. Desde el Partido Comunista y el Frente Amplio apuntaron directamente al PS, especialmente tras la inesperada votación del artículo 28, donde varios convencionales, que estaba conectado telemáticamente, no pudieron votar.
