Miles de manifestantes marcharon en puertos desde California hasta Alaska, en acciones vistas como un reflejo del impulso del movimiento "Occupy", con la esperanza de concientizar sobre la desigualdad económica y un sistema financiero que consideran favorece a los ricos.
Oakland, EE.UU. Activistas anti-Wall Street que intentaron paralizar los puertos de la costa oeste de Estados Unidos lograron cerrar varias terminales y chocaron con la policía, pero no pudieron montar el bloqueo de carga a gran escala que habían prometido.
Miles de manifestantes marcharon en puertos desde California hasta Alaska, en acciones vistas como un reflejo del impulso del movimiento "Occupy", con la esperanza de concientizar sobre la desigualdad económica y un sistema financiero que consideran favorece a los ricos.
Varios lograron interrumpir la llegada de camiones y trabajadores portuarios en algunos puertos de la costa, efectivamente cerrando dos terminales en Oregon y una tercera en el estado de Washington. También afectaron algunas operaciones en Oakland.
"¿Los puertos de quién? ¡Nuestros puertos!", gritaron unos 1.000 activistas en Oakland, epicentro de las protestas, que desfilaron temprano desde una estación de tránsito hasta un puerto de carga de la ciudad y se dividieron en grupos para intentar bloquear las entradas a las terminales.
La acción coordinada se produjo después de que el movimiento "Occupy", que nació en Nueva York en septiembre y se expandió por todo el país, sufrió desalojos de campamentos en la mayoría de las grandes ciudades del oeste por parte de la policía.
Pero, al anochecer, los manifestantes no habían podido provocar la parálisis a gran escala que buscaban y decenas de personas fueron arrestadas a lo largo de la costa.
Las mayores marchas se produjeron en Oakland, donde los manifestantes esperaban repetir la convocatoria de una protesta previa que logró brevemente interrumpir el puerto, el quinto más activo del país en volumen.
La alcaldesa de Oakland, Jean Quan, dijo que la protesta en el puerto, lejos de ayudar a la clase trabajadora, en realidad estaba afectando a la ciudad y sus trabajadores. El lunes por la noche, la policía indicó que unos 500 manifestantes seguían ubicados en una ruta usada por camiones de carga.
"La gente tiene que pensar en las consecuencias del cierre", dijo Quan a periodistas. "Creo que la clase dirigente se está riendo en este momento", agregó.
A lo largo del día, las operaciones en varias de las siete terminales del Puerto de Oakland fueron interrumpidas y demoradas y algunas cerraron antes, informó el complejo en un comunicado.
