Las investigaciones sobre los ataques del 13 de noviembre en París en los que fallecieron 130 personas revelaron que muchos de los atacantes vivían en Bélgica, incluyendo a los principales sospechosos Salah Abdeslam y Mohamed Abrini.
Bruselas. Las personas que planificaron los ataques con bombas que el 22 de marzo mataron a 32 personas en Bruselas habían proyectado inicialmente atacar Francia por segunda vez, pero finalmente optaron por Bélgica después de que los investigadores detuviesen a los principales sospechosos, dijo el domingo la fiscalía belga.
Las investigaciones sobre los ataques del 13 de noviembre en París en los que fallecieron 130 personas revelaron que muchos de los atacantes vivían en Bélgica, incluyendo a los principales sospechosos Salah Abdeslam y Mohamed Abrini, que eludieron a la policía durante cuatro meses.
Abrini fue arrestado el viernes y admitió haber participado en los ataques al aeropuerto de Bruselas. Ha sido acusado de asesinatos terroristas, según los fiscales.
"Numerosos elementos en la investigación han mostrado que el grupo terrorista inicialmente tenía intención de volver a golpear en Francia", dijo el fiscal general de Bélgica en un comunicado.
El acecho de los investigadores belgas a los atacantes les llevó a decidir golpear objetivos más cercanos. Abdeslam, sospechoso de participar en los ataques a París, fue arrestado el viernes después de los ataques al aeropuerto de Bruselas.
"Sorprendidos por la rapidez en el progreso de las investigaciones, decidieron atacar en Bruselas", dijo la fiscalía en el comunicado.
