Durante la sesión pasada, realizada el 3 de mayo, el juicio tuvo que ser suspendido luego de 10 minutos de iniciado debido a que los padres de las víctimas que no pudieron ingresar a la sala comenzaron a protestar y a criticar al Poder Judicial.
Buenos Aires, Andina. El nuevo juicio por el incendio que causó la muerte de 193 personas en la discoteca República de Cromañón, de Buenos Aires, se inició hoy en los tribunales porteños, tras quedar en suspenso la semana pasada a raíz de incidentes con familiares de las víctimas.
El debate comenzó a las 09:30 hora local en el Salón de Usos Múltiples (SUM) del edificio de Comodoro Py 2002, donde los integrantes del Tribunal Oral Criminal decidieron trasladarse para contar con un espacio mayor para que puedan ingresar más familiares y evitar así nuevos inconvenientes.
Durante la sesión pasada, realizada el 3 de mayo, el juicio tuvo que ser suspendido luego de 10 minutos de iniciado debido a que los padres de las víctimas que no pudieron ingresar a la sala comenzaron a protestar y a criticar al Poder Judicial.
Al debate de hoy llegó el dueño del local donde funcionaba Cromañón, el empresario Rafael Levy; el ex secretario de Seguridad porteño Juan Carlos López; su segundo, Enrique Carelli, el ex director de Seguridad Privada Vicente Rizzo y el ex comisario de la seccional 7ma. Gabriel Sevald.
La acusación más grave pesa contra Levy, procesado como coautor de estrago doloso agravado por la muerte de personas en concurso real con cohecho activo: el primer delito tiene una pena de entre ocho y 20 años de cárcel y el segundo de 1 a 6.
A Levy se lo responsabiliza directamente por el incendio y también de pagar coimas para que el local, ubicado en la calle Bartolomé Mitre, no fuera controlado por la policía.
La tragedia ocurrió el 30 de diciembre de 2004, cuando el grupo de rock Callejeros tocaba en el local y un grupo de jóvenes nunca identificados arrojó bengalas que incendiaron el techo.
Por el hecho, se realizó un primer juicio en el que se condenó al ex gerente Omar Chabán, a su mano derecha, Raúl Villareal, al ex subcomisario Rubén Díaz y se absolvió a la banda Callejeros, luego condenada a partir de un fallo de la Cámara de Casación.
