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Un militar muere en Perú tras choque con presuntos rebeldes
Jueves, Febrero 16, 2012 - 14:31

Es la segunda baja de un oficial del Ejército en menos de tres meses en la Base Unión Mantaro, la cual está ubicada en la zona selvática al sur del país.

Lima. Un militar murió y otro resultó herido tras un choque entre las fuerzas de seguridad y presuntos rebeldes en una base ubicada en una zona selvática del sur de Perú, informaron este jueves fuentes del Ejército.

Es la segunda baja de un oficial del Ejército en menos de tres meses en esa misma base, ubicada en la región de Ayacucho, una de las zonas que conforman el Valle de los Ríos Apurímac y Ene conocida como el VRAE y donde opera la guerrilla Sendero Luminoso en alianza con el narcotráfico.

El ataque se produjo cuatro días después de que el gobierno capturara al importante líder rebelde "Camarada Artemio" en otra zona selvática del país donde operaban remanentes del grupo rebelde.

Según una fuente militar, los "narcoterroristas" atacaron la Base Unión Mantaro, donde falleció un capitán del Ejército. La fuente se excusó de dar más detalles.

Sin embargo, otra fuente del Ejército informó que la información aún estaba confusa y explicó que la baja se dió tras un enfrentamiento entre los presuntos rebeldes y las fuerzas de seguridad

En noviembre del año pasado, esta misma base militar fue atacada por rebeldes, dejando un militar fallecido y dos heridos.

El gobierno peruano capturó el domingo al Camarada Artemio, uno de los dos líderes del grupo guerrillero Sendero Luminoso, que operaba con los narcotraficantes en la zona del Alto Huallaga, al noreste de Lima, en la primera gran victoria del Gobierno del presidente Ollanta Humala contra los remanentes del movimiento rebelde.

Tras la captura de Artemio, el gobierno afirmó que redistribuiría las fuerzas de seguridad hacia la zona del VRAE, controlada por Víctor Quispe Palomino, alias "José", como parte de su lucha contra los remanentes de Sendero Luminoso, grupo maoísta que tuvo se apogeo en las décadas de 1980 y 1990.

En los últimos tres años, más de 50 militares y policías han muerto en choques o ataques rebeldes.

Autores

Reuters