Tras llegar a un acuerdo con el gobierno, los transportistas terminaron con una movilización de 15 días que amenazaba el comercio y con provocar escasez de alimentos en las ciudades.
Bogotá. Los camioneros de Colombia levantaron este viernes una huelga de 15 días que amenazaba con afectar el comercio internacional y provocar escasez de alimentos en las ciudades, al lograr un acuerdo con el gobierno, dijeron las partes involucradas en la negociación.
El vicepresidente Angelino Garzón informó que el gobierno postergó el desmonte de una tabla de fletes, la principal demanda que originó la protesta de los transportadores que consideran que sin ese instrumento se producirá una caída en los precios de la carga que los llevaría a la quiebra.
El acuerdo se logró entre Garzón y el ministro de Transporte, Germán Cardona, con los directivos de la Asociación Colombiana de Camioneros (ACC), el principal gremio de carga, conformado por unos 120.000 transportadores.
"Como consecuencia de la firma del acuerdo, se pone fin al paro nacional de los propietarios de camiones", dijo Garzón en una conferencia de prensa.
Los camioneros también se comprometieron a levantar los bloqueos de vías en Bogotá y de carreteras en diferentes regiones del país, que provocaron dificultades en el transporte público de pasajeros.
"El paro y la inmovilización a nivel nacional queda levantado", dijo por su parte el presidente de la ACC, Pedro Aguilar.
Minutos antes de la firma del acuerdo, escuadrones de la policía lanzaron gases lacrimógenos en autopistas del suroeste de Bogotá y arrestaron a algunos camioneros en cumplimiento de un ultimátum del presidente Juan Manuel Santos, quien había advertido el jueves que no permitiría bloqueos de vías.
Pero el vicepresidente dijo que como parte del acuerdo y del espíritu de conciliación del gobierno, los transportadores arrestados serán puestos en libertad, mientras que la policía se abstendrá de hacer uso de la fuerza en las zonas en donde se presenten bloqueos y facilitará la evacuación de los camiones.
La producción de café de Colombia se mueve por carreteras y camiones hacia los puertos para su exportación, por lo que la continuidad de la protesta amenazaba con afectar los despachos, así como con provocar escasez de alimentos y alzas en sus precios en las principales ciudades del país.
La protesta no provocó impacto en las exportaciones de carbón y de petróleo de Colombia, debido a que la mayoría de los envíos se hacen a través de ferrocarriles de las empresas productoras y de oleoductos.
Garzón dijo que pese a la desconfianza de los transportadores, el Gobierno cumplirá todos los puntos incluidos en el acuerdo que incluye controles al ingreso de vehículos de carga de países vecinos.
El desmonte de la tabla de tarifas de carga se abordará en una mesa de concertación que funcionará hasta el 15 de junio y de la que saldrá un sistema regulatorio.
"Vamos a construir confianza, este país necesita construir confianza", declaró por su parte el ministro de Transporte.
