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Capriles: “si ellos son socialistas, yo soy marxista-leninista”
Miércoles, Septiembre 12, 2012 - 16:59

Así respondió el líder opositor Henrique Capriles a las acusaciones de Hugo Chávez, quien lo tildó de ser "un niño rico disfrazado de pobre".

La batalla por mostrarse más cerca de las clases necesitadas, con mayor tinte socialista (real o aparente) y la pelea por la estabilidad y la seguridad en el país, es el escenario en el que se está desarrollando la campaña electoral de Venezuela, polarizada por el candidato a la reelección, el presidente Hugo Chávez, y el opositor Henrique Capriles.

Acusaciones y promesas son moneda corriente. Mientras Capriles intenta convencer con las primeras cartas -de un eventual gobierno- jugadas al aumento de salarios y a mejorar la seguridad, Chávez habla de un escenario de desestabilización y de "paquetazo neoliberal" si no vuelve a ganar "la revolución".

Si bien el mandatario negó que vaya a promover la tesis de desestabilización del país en caso de que pierda las elecciones, dijo que "la realidad" sobre dicha hipótesis "radica en el verdadero programa burgués ", de la propuesta de Capriles.

¿Socialistas? El candidato de la alianza opositora aseguró que, en caso de alcanzar el gobierno, utilizará los primeros 100 días para garantizar la seguridad a los ciudadanos y elevar los salarios más bajos.

En un acto de campaña realizado el lunes, Capriles indicó que su programa está enfocado "en lo social". Sin embargo, Chávez asegura que se trata de un "paquetazo neoliberal" de un "niño rico, disfrazado de pobre".

En el cruce de declaraciones, Capriles dobló la apuesta. "Le oigo decir a algunos voceros del gobierno que son socialistas; si ellos son socialistas yo soy marxista-leninista", dijo mientras invitó a "comparar quién hace más en lo social y quién utiliza los recursos para solucionar los problemas del pueblo".

En economía. A falta de cuatro semanas para las elecciones, Capriles anunció que "una primera medida" concreta que adoptará el 10 de enero -fecha en que asumirá el ganador de las elecciones- será aumentar casi el 25% el salario mínimo: de 2.047 bolívares (US$ 476) a 2.500 bolívares (US$ 581).

Indicó que la cifra se ajustaría el mismo día de la toma de posesión del mando para que los venezolanos "empiecen a sentir el progreso".

"El gobierno central nos dice que tenemos uno de los salarios mínimos más altos de Latinoamérica y eso es una gran mentira. Nuestro compromiso será que el dinero alcance, que el salario permita cubrir la canasta alimentaria y ahorrar", agregó Capriles. Además, en el plano macroeconómico promete reducir la inflación, que con 18,1% es una de las más altas del continente.

Política petrolera. Otro punto de debate en la campaña es la política petrolera, ya que el candidato opositor acusa a Chávez de desperdiciar la riqueza de Venezuela en contratos de suministro de combustible con países aliados, como Cuba y Nicaragua, que implican financiamiento a largo plazo y con intereses bajos.

"No vamos a regalar una gota más de petróleo a ningún país", exclamó Capriles en el último acto.

En tanto, Chávez refuta esa descripción y asegura que Venezuela ha alcanzado acuerdo petroleros mutuamente beneficiosos con sus aliados durante su gobierno.

El opositor señaló que esa situación se terminará si asume el mando y que pondrá el ojo en los destinos del crudo".

"Este gobierno importa gasolina de EE.UU. y dice que lucha contra el imperialismo. Importa arroz de EE.UU. y dice que logró la independencia", atacó Capriles haciendo foco en lo que entiende como una contradicción entre los discursos y las acciones de Chávez.

Seguridad

La violencia también ha tenido a maltraer a la sociedad de aquel país, tanto en lo que respecta a la seguridad pública como a la situación carcelaria.

En ese sentido, Capriles anuncia un plan de desarme y la destrucción de armas ilegales, además de un incremento de 20 mil funcionarios policiales para combatir el delito en las calles, que en 2011 dejó el saldo de 14 mil muertos.

"El problema de la seguridad, el problema de la violencia, requiere al jefe de Estado al frente", dijo al reiterar que apoyará al Poder Judicial y a la Fiscalía para que realicen su trabajo sin controles o presiones del gobierno.

Además, dijo que activará un proceso de transformación del sistema penitenciario para "acabar con los muertos en las cárceles venezolanas", pues desde las cárceles se planifican secuestros y otras acciones.

Capriles insistió en que el gobierno de Chávez, de casi 14 años, ha hecho que Venezuela tenga una de las tasas de homicidios más altas del mundo, prisiones plagadas de violencia y hospitales en ruinas.

Por su parte, el presidente dijo que quien quiere tranquilidad se inclinará por el continuismo de su gobierno. En ese sentido atacó con precisión: "Hasta a los ricachones que quieren la tranquilidad les interesa que gane Chávez. Los invito a que voten por Chávez. (Eso) les garantiza paz, estabilidad, crecimiento económico".

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