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El departamento que tiene contra las cuerdas a Lula
Miércoles, Julio 12, 2017 - 13:29

El juez Sergio Moro lo encontró culpable en el caso en que se le acusa de ser el verdadero propietario de un apartamento triplex en la localidad de Guarujá, litoral de Sao Paulo.

El juez Sergio Moro, que lleva todos los grandes casos de corrupción del sistema político brasileño, concluyó este miércoles que Luiz Inácio Lula da Silva es culpable de corrupción pasiva y lavado de dinero, y lo condenó a nueve años y medio de prisión.

El caso mayor: Lava Jato. El caso se enmarca dentro de la mega causa de corrupción denominada Lava Jato, por la cual ha ido a prisión buena parte del sistema político.

Moro acusó originalmente a Lula de ser el "líder máximo" del esquema de corrupción del Lava Jato, por el cual se usaba la actividad económica de Petrobras para pagar coimas a través del sistema político que permitiera la gobernabilidad del país, dentro de un esquema político complejo, con múltiples partidos y alianzas políticas. En ese marco, tiene otras cuatro causas abiertas contra el presidente, además de la que usó para condenarlo este miércoles. Siempre según el juez Moro, Lula supervisó el desvío de 87 millones de reales desde Petrobras al sistema político, en coordinación con la constructora OAS, que se llevaba todas las grandes obras vinculadas a la petrolera.

El caso concreto: el triplex en San Pablo. La causa por la cual Lula fue condenado este jueves apunta a que el expresidente recibió 3,7 millones de reales de parte de OAS, en concepto de un apartamento triplex que la empresa le traspasó a Lula en Guarujá, en el Estado de San Pablo.

Léo Pinheiro, ex presidente de OAS y también condenado en el caso, reconoció haberle pagado a Lula con ese apartamento a cambio de favores (2,4 millones). Además, según informa Veja basado en la sentencia, OAS pagó 925 mil reales en concepto de refacción del apartamento, y otros 350 mil en el amoblamiento.

De todos modos, el juez absolvió a Lula en otra acusación de corrupción en ese esquema: la de que OAS pagó 1,3 millones reales a una empresa que almacenó bienes de Lula una vez que éste dejó el palacio presidencial.

Lula siempre negó la acusación, porque dijo que no era dueño del apartamento.

¿Cómo llegaron OAS y Lula a ese apartamento? El Condominio Solaris había sido mandado construir por la Cooperativa Habitacional de los Bancarios (Banccoop), según informó Estado de Sao Paulo. La fallecida ex esposa de Lula, Marisa Leticia, figuraba como una de las propietaria originalmente.

Sin embargo, por problemas de deudas, el Banccoop terminó cediendo a la constructora OAS el complejo sin terminar en 2009. Allí es que se da la maniobra: según Moro, OAS no tomó posesión del triplex del matrimonio Da Silva, y siempre lo manejó como una propiedad de Lula. Pinheiro dijo que era vox pópuli dentro de la OAS "que el apartamento era de Lula".

Según la investigación de la Justicia, a cambio de ese apartamento, el gobierno otorgó a OAS contratos en las refinerías de Abreu Lima, en el estado de Pernambuco, y Getulio Vargas, en el estado de Paraná.

La defensa de Lula siempre negó las acusaciones y sostiene que el triplex nunca fue propiedad del presidente, y que de hecho en 2010 OAS transfirió los derechos económicos y financieros del inmueble a un fondo de inversión gestionado por el banco Caixa Económica, por lo que no podría haber sido objeto de una coima.

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