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El Salvador: inédita tregua entre pandillas baja los índices de homicidios
Domingo, Junio 17, 2012 - 17:41

Los líderes de las pandillas 18 y Mara Salvatrucha (MS-13) acordaron en marzo poner fin a los enfrentamientos y asesinatos para reducir los alarmantes índices de homicidios en el empobrecido país.

Una inédita tregua entre dos violentas pandillas salvadoreñas para disminuir la alta tasa de homicidios en el país centroamericano cumplió este sábado 100 días y ha comenzado a dar los resultados esperados, dijo la Iglesia Católica, garante del proceso.

Los líderes de las pandillas 18 y Mara Salvatrucha (MS-13) acordaron en marzo poner fin a los enfrentamientos y asesinatos para reducir los alarmantes índices de homicidios en el empobrecido país.

Para celebrar los resultados del acuerdo entre las denominadas "maras", el capellán de la policía y el Ejército, Monseñor Fabio Colindres, presidió un acto religioso en la cárcel de Quezaltepeque, a unos 25 kilómetros al noroeste de la capital del país.

"Los resultados están a la vista, son más de 800 vidas que se han economizado, nos sentimos contentos de que este proceso de paz vaya paulatinamente caminando", dijo Colindres.

Luego de declararse la tregua, las estadísticas policiales indican que los asesinatos se redujeron a cinco diarios, desde los 12 previos.

La policía reporta que entre enero y mayo de 2012 los asesinatos se redujeron en 21% comparado con el mismo período del año anterior.

En el 2011, la tasa de asesinatos en El Salvador fue de 66 homicidios por cada 100.000 habitantes, una de las más altas del planeta, según Naciones Unidas.

Uno de los líderes de la pandilla 18, que se identificó como "Huggie Boy", dijo a Reuters que "sentimos satisfacción de estar realizando nuestro propósito (...) Va caminando la tregua".

Para fomentar la tregua, el gobierno de izquierda encabezado por el presidente Mauricio Funes inició mesas de negociación entre políticos, empresarios, líderes de universidades e iglesias de todos los credos para buscar espacios de inserción social para los pandilleros.

Autores

Reuters