Eduardo Montealegre aseguró que un equipo de 300 personas se encuentra reforzando las investigaciones que permitan la identificación de estos "delincuentes".

Bogotá. El fiscal general de Colombia, Eduardo Montealegre, dijo este martes a medios locales que tiene evidencias “contundentes” de que miembros de las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del Ejército de Liberación Nacional (ELN) están infiltrando el paro campesino que se vive hace dos días en el país.

Montealegre aseguró que un equipo de 300 personas se encuentra reforzando las investigaciones que permitan la identificación de estos "delincuentes", que son quienes promueven la alteración de orden público durante las movilizaciones de protesta.

En contraparte, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Colombia aconsejó no estigmatizar a los manifestantes y relacionarlos con grupos subversivos, ya que esto podría generar actos violentos.

El fiscal señaló que las FARC estarían infiltrando las manifestaciones en Arauca, Nariño y Caquetá, mientras que el ELN haría lo mismo en el Norte de Santander.

El fiscal recordó que todos aquellos que bloqueen vías y lideren actos vandálicos durante las manifestaciones serán judicializados.

Por su parte, Juan Carlos Pinzón, ministro de Defensa de Colombia, rechazó las declaraciones del coordinador de las Naciones Unidas en Colombia, Fabrizio Hochschild, en torno a la estigmatización de los campesinos durante el paro.

Hochschild señaló que no era prudente estigmatizar a los manifestantes y relacionarlos con grupos subversivos, ya que esto podría generar actos violentos.

“Es muy importante para evitarla que se deje de estigmatizar el paro, que se deje de estigmatizar las protestas, que se deje de tratar las protestas como si fueran una extensión de la guerrilla. Eso no ayuda a nada”, dijo.

Pinzón respondió a Hochschild que el gobierno colombiano -de derecha- respeta la protesta legítima de los campesinos, pero no tolerará la inminente participación de rebeldes, evidenciada por documentos como panfletos, en los que se presiona a los campesinos a marchar armados.

Entre tanto, en Bogotá, el ministro de Agricultura Rubén Darío Lizarralde y líderes del sector agropecuario se reunían para buscar un acuerdo que ponga fin al paro indefinido que busca soluciones a problemas de fondo en este sector.

El gobierno insiste en hasta a la fecha ha cumplido con la mayoría de compromisos pactados con los campesinos en 2013, mientras que los campesinos piden tratar temas como precios de los insumos y la revisión de acuerdos comerciales internacionales (TLC).

Los manifestantes han realizado ataques con piedras contra vehículos que transitan por carreteras de municipios como La Calera, Choachí y Tunja, mientras que en Florencia y Neiva quemaron vehículos y un agente de la Policía resultó herido con arma de fuego.

En la Universidad Nacional, con sede en Bogotá, se presentaron por segundo día intensos enfrentamientos entre manifestantes y el Escuadrón Móvil Antidisturbios de la Policía (ESMAD).