El Secretario de Educación Pública precisó que se propone la creación, en los seis años del gobierno, de más de 40.000 escuelas de tiempo completo con jornadas de las 8 a las 16 horas, tres horas más de las que actualmente se imparten.
México. La creación de 40.000 escuelas de tiempo completo en México, un Servicio Profesional Docente y un Instituto Nacional de Evaluación para la Educación, son los tres ejes de la iniciativa de reforma educativa que planteó hoy el gobierno de Enrique Peña.
La reforma, afirmó Peña plantea "elevar sustancialmente los estándares de cobertura y calidad de educación que reciben los niños y jóvenes".
"Y promueve el crecimiento del programa escuelas de tiempo completo", añadió el mandatario en un acto oficial para la presentación del proyecto en el Museo Nacional de Antropología e Historia, en la capital mexicana.
El Secretario de Educación Pública (SEP), Emilio Chuayffet, dijo que la propuesta de reforma, que se envió a la Cámara de Diputados, busca "respetar los derechos individuales y colectivos del magisterio, pero con la ley en la mano para vigilar que cumplan con sus funciones".
Chuayffet precisó que se propone la creación, en los seis años del gobierno, de más de 40.000 escuelas de tiempo completo con jornadas de las 8 a las 16 horas, tres horas más de las que actualmente se imparten.
Dijo que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) realizará un conteo de docentes y escuelas, para comenzar el proceso de hacer eficiente la educación.
Según estadísticas del INEGI, en su última actualización en el 2009, en el ramo de educación, existen 99.217 escuelas de educación básica en el país; 34.851 de educación secundaria y 12.929 de educación media superior, además de 1,2 millones de docentes.
El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), que lidera de manera vitalicia Elba Esther Gordillo, hizo público en febrero de este año que tenía afiliados a 1,8 millones de personas, 600.000 más de las cifras públicas del INEGI en 2009.
La reforma educativa luce como un reto difícil para el nuevo gobierno de Peña que deberá lidiar con la lideresa Gordillo, acusada de bloquear reformas profundas al sistema educativo que podrían impulsar a la segunda economía latinoamericana.
Gordillo encabeza el SNTE desde hace dos décadas, desde el gobierno de Carlos Salinas, con el apoyo del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el mismo partido al que pertenece el presidente Peña.
El nuevo mandatario confió en avanzar en la reforma con "nuevas asignaciones presupuestales y la infraestructura que sea necesaria", además del apoyo de las diversas fuerzas políticas PAN y PRD que recién firmaron el "Pacto por México".
El 1 de diciembre, durante su primer discurso como presidente de México, Peña enunció sus 13 propuestas para modernizar el país, entre ellas esta reforma educativa que también busca eliminar las plazas vitalicias y hereditarias entre los docentes.
