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Gobierno sirio acusa a rebeldes por masacre en Houla
Domingo, Mayo 27, 2012 - 13:37

Naciones Unidas ha acusado tanto a las fuerzas de Assad como a los insurgentes de graves violaciones a los derechos humanos, entre ellas ejecuciones sumarias y torturas.

En respuesta a la creciente indignación mundial por la matanza de al menos 109 personas en el pueblo de Houla, Siria acusó el domingo a los rebeldes de llevar a cabo una masacre en la que murieron decenas de niños.

Las imágenes de cadáveres de menores ensangrentados, yaciendo unos junto a otros tras la matanza del viernes en Houla, provocaron una conmoción en todo el mundo y pusieron en evidencia el fracaso del alto el fuego auspiciado hace seis semanas por la ONU para poner fin a la violencia.

Las autoridades sirias acusaron a "terroristas" de la masacre, la peor matanza en los 14 meses de revuelta popular contra el presidente Bashar al Assad, que ha costado cerca de 10.000 vidas.

"Mujeres, niños y ancianos fueron tiroteados. Este no es el sello del heroico Ejército sirio", dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores Jihad Makdesi a periodistas en Damasco.

Activistas de oposición dijeron que las fuerzas de Assad bombardearon el pueblo de Houla después de una protesta y tras escaramuzas entre tropas y combatientes de la insurgencia suní.

Según los activistas, milicianos conocidos como "shabbiha", leales al régimen de Assad, asediaron a docenas de víctimas y las mataron con disparos a quemarropa.

Observadores militares y civiles de Naciones Unidas contaron el sábado 32 niños menores de diez años entre los al menos 92 muertos. Activistas dijeron que se han encontrado más cadáveres desde entonces. Los observadores confirmaron el uso de artillería, que sólo tienen las fuerzas de Assad, pero no dijeron cómo murieron todas las víctimas.

Países occidentales y estados árabes que se oponen a Assad culparon directamente a Damasco.

El enviado de la ONU y la Liga Arabe en Siria, Kofi Annan, y el Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, acusaron el sábado al Gobierno sirio de utilizar artillería en zonas densamente pobladas.

En tanto, la responsable de la política exterior de la Unión Europea, Catherine Ashton, dijo el domingo en un comunicado que la masacre fue un "acto atroz perpetrado por el régimen sirio contra su propia población civil".

La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, exigió el sábado que los responsables de la masacre rindan cuentas.

"Estados Unidos trabajará con la comunidad internacional para intensificar nuestra presión sobre Assad y sus amigotes, cuyo gobierno de asesinato y miedo deben terminar", dijo.

Francia anunció que convocará a una reunión de los Amigos de Siria por la masacre y que pedirá una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU en los próximos días.

Emiratos Arabes Unidos solicitó una reunión urgente de la Liga Arabe, cuyo presidente, Nabil Elaraby, instó a Estados Unidos a detener la matanza.

Sin embargo, no ha habido comentarios oficiales de Rusia, que junto con China, ha vetado las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que piden acciones más duras contra Siria.

Aunque el plan de alto el fuego negociado por el ex secretario general de la ONU Kofi Annan no ha logrado frenar la violencia, Naciones Unidas está a punto de culminar el despliegue de una fuerza de observación de 300 hombres sin armas destinado a vigilar la tregua.

El plan pide la consolidación del alto el fuego, la retirada de tropas de las ciudades y un diálogo entre el gobierno y la oposición.

Siria califica la revuelta de una conspiración "terrorista" dirigida desde el exterior, una velada referencia a las potencias musulmanas suníes del Golfo Pérsico, que quieren entregar armas a los insurgentes.

Naciones Unidas ha acusado tanto a las fuerzas de Assad como a los insurgentes de graves violaciones a los derechos humanos, entre ellas ejecuciones sumarias y torturas.

Autores

Reuters