A través de una carta enviada a 27 alcaldes de ciudades europeas, Ada Colau pidió a estos que apoyen su solicitud de implicación de la UE en un enfrentamiento que ha sumido a España en una de sus mayores crisis políticas en décadas.

Madrid. La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, pedirá la mediación de la Comisión Europea para una salida dialogada al conflicto entre los Gobiernos español y catalán por la celebración de un referéndum sobre la independencia el 1 de octubre, ya que afirmó, ha dejado de ser un asunto interno.

A través de una carta enviada a 27 alcaldes de ciudades europeas, Colau pidió a estos que apoyen su solicitud de implicación de la UE en un enfrentamiento que ha sumido a España en una de sus mayores crisis políticas en décadas.

“Pediré a la Comisión Europea que abra un espacio de mediación en el que participen el Gobierno español y el Gobierno catalán con el fin de buscar una salida dialogada”, dijo Colau en la carta publicada el jueves en su cuenta de Twitter.

“Ante la negativa del Gobierno de (Mariano) Rajoy a encontrar una solución acordada para el conflicto, la cuestión catalana ya no puede ser considerada un mero asunto interno español, y debe abordarse en su justa dimensión europea”, agregó.

A medida que se acerca la fecha elegida por los independentistas, el Gobierno central ha incrementado el cerco policial contra la consulta, que considera ilegal, mientras el Ejecutivo regional sigue insistiendo en su celebración pese a que se encuentra paralizada por el Tribunal Constitucional.

Entre las medidas del Ejecutivo central para desmantelar el mecanismo electoral de Cataluña que han sido calificadas de “desproporcionadas” por algunos portavoces judiciales, se encuentran un mayor control sobre el uso de los fondos públicos, la detención de altos cargos regionales, la incautación de papeletas y el cierre de webs relativas al referéndum.

“Pese a no ser independentista y haber criticado la vía unilateral seguida por el Gobierno catalán, me siento alarmada ante la respuesta represiva que ha emprendido el Gobierno español para impedir el referéndum del 1 de octubre”, agregó Colau.

En una entrevista el jueves con TV3, Colau señaló que no era partidaria de una declaración unilateral de independencia en caso de imponerse el “sí” en la consulta, tal y como contempla el proyecto del Parlament, pero afirmó que una movilización masiva el domingo dará fuerza para replantear una negociación política.

En el choque institucional entre el Gobierno español y catalán, ambas partes se han reprochado con frecuencia la ausencia de voluntad negociadora, una opción que previsiblemente volverá a plantearse tras el 1-O.

“Ninguna de estas medidas contribuirá a solucionar el conflicto catalán, un conflicto político que sólo puede ser resuelto por vías políticas”, dijo la alcaldesa en su carta.

Analistas y la mayoría de los políticos creen que el enfrentamiento podría resolverse mediante un diálogo renovado entre las autoridades catalanas y españolas que conduciría a un mejor trato fiscal y un mayor gasto en infraestructuras para la región.

“Europa no puede desentenderse de una amenaza a los derechos y las libertades fundamentales, cuya protección y defensa constituyen la principal razón de ser del proyecto europeo”, concluyó Colau.