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Leve baja de participación en las elecciones legislativas francesas
Domingo, Junio 10, 2012 - 12:27

Al mediodía local, la tasa de participación era del 21,06%, un porcentaje también levemente inferior a la registrada a la misma hora en las elecciones legislativas de 2007, de 22,56%, según datos del Ministerio del Interior galo.

Una leve baja se registró en la participación en la primera vuelta de la elección legislativa que renovará la totalidad de la Cámara de Diputados, según información proporcionada por la Comisión Nacional Electoral, que señaló que a las 17 horas locales habían concurrido un 48,31% de los votantes.

La cifra representa un punto porcentual menos que en las elecciones legislativas registradas en 2007, momento en que la participación a la misma hora alcanzaba un 49,28%.

Alrededor de 46 millones de franceses están habilitados para la jornada electoral de este domingo que renovará la totalidad de la Cámara de Diputados, y en donde el Partido Socialista (PS) del presidente Francois Hollande junto a sus aliados de izquierda parte como favorito para lograr la mayoría absoluta.

Los franceses deberán elegir entre alguno de los 6.603 candidatos para renovar la totalidad de la Cámara de Diputados (577 bancas).

Al mediodía local, la tasa de participación era del 21,06%, un porcentaje también levemente inferior a la registrada a la misma hora en las elecciones legislativas de 2007, de 22,56%, según datos del Ministerio del Interior galo.

Esta escasa participación no es una sorpresa, pues los últimos sondeos auguraban una abstención de entre el 40% y 45%.

Hollande, quien goza de una imagen positiva más importante que al ser electo (pasó de 58% a 62%, según un sondeo de Viavoice), votó este domingo por la mañana en la localidad de Tulle (centro) y por la noche estará en la sede del PS en París para seguir los resultados.

El mandatario llamó a su partido a no confiarse y movilizarse para obtener “una mayoría larga, sólida y coherente. No lograré conducir el cambio, el que los franceses me pidieron que ponga en marcha, si no poseo una mayoría en la Asamblea Nacional (Diputados), subrayó Hollande esta semana.

Por su parte, la conservadora Unión por una Mayoría Popular (UMP) afronta dificultades internas y divisiones, que se profundizaron luego de la derrota de Nicolas Sarkozy el 6 de mayo y su retiro de la política.

“Si la izquierda gana, durante cinco años no podremos hacer nada para detener su locura”, lanzo el secretario general de la UMP, Jean-Francois Copé, este sábado en un discurso en el sur de Francia.

De ganar la elección legislativa, el PS se encontraría en una inédita situación de poder, al contar con la presidencia, la mayoría en ambas Cámaras, la gobernación de casi todas las regiones y departamentos y las ciudades más importantes del país.

La elección es vital para las aspiraciones de Hollande de implementar su programa de gobierno.

En caso de derrota –algo poco probable según los sondeos-, Hollande se vería obligado a nombrar un Primer ministro conservador, dado que el actual Premier, Jean-Marc Ayrault, se vería forzado a renunciar a no ser valido su cargo por los diputados mayoritariamente conservadores.

A ese escenario se le llama Cohabitación, conocido por el estancamiento en que se sumerge el país ante esa situación y que ya tuvo lugar en tres oportunidades durante los gobiernos de Francois Miterrand, entre 1986-988 con Jacques Chirac como Premier, luego entre 1993-1995 con Edouard Balladour, y luego bajo la presidencia de Chirac con Lionel Jospin, entre 1997-2000.

Sin embargo, las encuestas indican que el PS, en alianza con los Verdes y las formaciones situadas más a su izquierda, lograría una victoria más que suficiente para obtener mayoría absoluta.

Autores

Télam