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Ministro de Trabajo de Brasil sería separado del cargo por escándalo
Domingo, Diciembre 4, 2011 - 17:03

La presidenta Dilma Rousseff le informaría a Carlos Lupi este domingo o lunes que su presencia en el gobierno es insostenible.

Río de Janeiro. El ministro del Trabajo de Brasil, Carlos Lupi, podría ser obligado a renunciar en medio de crecientes acusaciones de corrupción en la más reciente salida de un miembro del gabinete de la presidenta Dilma Rousseff por un escándalo, informó este domingo el diario Folha de Sao Paulo.

Rousseff le informaría a Carlos Lupi este domingo o lunes que su presencia en el gobierno es insostenible, agregó el periódico.

La presidenta ha perdido a seis de sus 32 ministros desde que asumió el mandato en enero y cinco de ellos fueron separados de sus cargos por escándalos que involucran acusaciones de corrupción.

La salida de los funcionarios ha debilitado las relaciones de Rousseff con los partidos de la coalición en el Congreso, un vínculo que necesita para aprobar un ambicioso programa de legislación social e inversión en infraestructura en el país.

Rousseff heredó a la mayoría de ministros que han abandonado sus funciones del gobierno de dos períodos de su predecesor del Partido de los Trabajadores (PT) y mentor Luiz Inácio Lula da Silva.

La presión sobre Lupi, que ha referido que "sólo una bala" podría removerlo de sus funciones, alcanzó su mayor nivel este miércoles cuando la Comisión de Etica Pública de la Presidencia de Brasil recomendó despedirlo de manera unánime por mala administración.

La investigación del comité, junto con una indagación del Congreso, ocurrió después de que la revista Veja reportó en noviembre que Lupi habría pedido sobornos a organizaciones de caridad y otras entidades no gubernamentales como condición para recibir financiamiento del ministerio, reportó Folha.

Lupi también habría favorecido a organismos no gubernamentales relacionados a su Partido Democrático Laborista y realizado una serie de viajes pagados por un contratista del ministerio.

En una de las últimas acusaciones, Lupi habría recibido un salario como empleado federal del Congreso por seis años, mientras que al mismo tiempo habría servido y recibido un sueldo como representante de la legislatura del estado de Río de Janeiro, reportó el diario.

Autores

Reuters