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Policía hondureña se encuentra infiltrada por el crimen organizado
Martes, Marzo 8, 2011 - 09:41

Las denuncias y casos comprobados en contra de los uniformados que participan en acciones delictivas van desde el abuso de autoridad hasta secuestros y tráfico de drogas.

La Policía Nacional de Honduras no solo debe vencer al crimen común y organizado en las calles. La guerra, desde hace un par de años, se ha trasladado incluso a lo interno del ente de seguridad.

La infiltración del crimen organizado y la corrupción en la Policía no son un secreto de los más guardados. Eso es una realidad.

Las denuncias y casos comprobados en contra de los uniformados que participan en acciones delictivas van desde el abuso de autoridad hasta secuestros y tráfico de drogas.

Las mismas autoridades de la Secretaría de Seguridad se han empeñado en evidenciar que la institución no es inmune a esos males que debilitan la estabilidad y credibilidad de la Policía Nacional.

Solo el 2010 se separó de la institución a por lo menos 150 agentes, dijo el director de la Policía Nacional, José Luis Muñoz. De esos, cerca de 20 pertenecían a la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC), apuntó por su lado el titular de ese organismo, Marco Tulio Palma.

Un bajo porcentaje de ellos pertenecían a la Dirección de Servicios Especiales Preventivos y Tránsito, y la mayor parte de ellos eran de Policía Preventiva.

Influencia en criminalidad. En los últimos años la corrupción policial y la infiltración del crimen se han confabulado con otros males que padece la institución, como la carencia de recursos y baja moral y autoestima del personal, y esto han impedido una labor efectiva contra el crimen común y organizado.

Prueba fehaciente de esta afirmación es que la sociedad hondureña vive una especie de psicosis por el alto índice de inseguridad, afirma el comisionado de los Derechos Humanos, Ramón Custodio.

Lo alarmante del asunto se puede medir en la última década, cuando se han registrado 39.343 muertes violentas.

Con esas cifras, Honduras se ha hecho merecedor a un lugar en el nada indeseable podio de los países más violentos de la región centroamericana.

La tasa de muertes violentas por cada 100.000 habitantes aumentó de 31.76 en 2000 a 66.8 en 2009. En 2010 la tendencia llegó a 72.8. Con esa tasa Honduras superó ocho veces la tasa mundial de 8.8 establecida por la Organización Mundial de la Salud en 2000.

En la misma medida en que crece la criminalidad aumentan los problemas de la Policía y el panorama parece no ser tan halagüeño, al menos no en el corto plazo.

Denuncias contra policías. La base de datos del Comisionado de los Derechos Humanos tiene un recuento de las denuncias interpuestas en contra de los policías durante los últimos cinco años.

Desde enero de 2005 hasta a junio de 2010 se interpusieron 4.907 denuncias en contra de elementos de la Policía Preventiva, mientras que hubo 2.868 denuncias contra la Dirección de Investigación; 7.775 en total. Datos revelados por las autoridades de la Secretaría de Seguridad indican que en los primeros dos meses de 2011 recibieron alrededor de 100 denuncias de abusos policiales que se suman a las más de 800 que registraron en 2010.

El ombudsman hondureño aseguró que la Policía Nacional es una de las instituciones claves en el país para mantener la paz y el orden interno, aunque admitió que su depuración si bien es indispensable no es una tarea fácil de realizar.

"Lo digo y acepto, la depuración de la policía no es fácil, demostrar quién es culpable no es fácil y si usted despide indebidamente a un policía, luego lo reintegra la ley, y hay que pagarle salarios caídos y volverlo a meter en la burocracia estatal", argumentó.

Expuso que los policías corruptos deben ser castigados, como ocurrió con diez elementos que fueron capturados en 2009 con 143 kilos de cocaína en Puerto Lempira, Gracias a Dios. Otros policías han sido capturados por ser cómplices de asaltos y secuestros.

Procesos de depuración. Para reducir la incidencia criminal por la infiltración del crimen organizado y la corrupción en la Policía, la Secretaría de Seguridad apuesta por seguir los lineamientos planteados en el Plan de Nación que aprobó el Poder Ejecutivo el año anterior. José Luis Muñoz, director de la Policía Nacional, dijo que tienen una misión institucional enmarcada en ese Plan de Nación que impulsa el presidente Porfirio Lobo Sosa.

El Congreso Nacional, mediante decreto 286-2009, aprobó la Ley para el Establecimiento de una Visión de País y la Adopción de un Plan de Nación para Honduras, que contempla en su segundo objetivo una "Honduras desarrollándose en democracia, con seguridad y sin violencia".

Muñoz Licona dijo que ese plan incluye un proceso de depuración, mediante un mejor adiestramiento de nuevos elementos policiales, que en definitiva busca disminuir los índices de criminalidad.

Las proyecciones del director apuntan a que haya 1.000 policías más a finales de este año, 2.000 para 2012, que se sumarán a los 555 que se graduaron en 2010. Con estos nuevos agentes la institución tendría unos 18.000 policías. "Esto es parte de nuestra misión, contemplada en la visión de país", apuntó Muñoz Licona.

Limitaciones presupuestarias. La Secretaría de Seguridad manejó en 2010 un presupuesto de 7.787,05 millones de lempiras (US$411 millones apróx.); el 88% del presupuesto se destina al pago de sueldos y salarios. El 12% restante se debe destinar para la operatividad, mantenimiento de vehículos, compra de equipo y municiones de los policías.

"Con ese porcentaje es imposible cubrir todas las necesidades", dijo. Actualmente el Congreso Nacional analiza una petición de ampliación del presupuesto de esa secretaría, hecha por el ministro de Seguridad, Óscar Álvarez. El funcionario solicitó 500 millones de lempiras adicionales (US$26,3 millones). Se ha dicho que la carencia presupuestaria obliga a los policías incluso a comprar su propia munición y uniformes.

Los salarios son bajos, reconoció el director de la Policía Nacional, "pero tratamos de compensarlos a través de un seguro médico, un seguro de vida, una jubilación".

Lo que no se puede compensar, dijo Muñoz Licona, es la forma de trabajar de la Policía. "Tenemos medios de comunicación desfasados, no hay tecnología, estamos trabajando con esquemas manuales y eso dificulta el avance de cualquier institución", lamentó.

El presidente Porfirio Lobo se reunirá esta semana con el titular del Congreso Nacional (CN), Juan Orlando Hernández, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Jorge Rivera, y el fiscal Luis Rubí para analizar los problemas que dificultan el combate de la delincuencia y la criminalidad en el país.

Lobo anunció que analizará las carencias de equipo y logística que enfrentan instituciones como la Secretaría de Seguridad.

En la reunión también estarán presentes los titulares de Seguridad y Defensa, Óscar Álvarez y Marlon Pascua, respectivamente. "Pepe" detalló que en el encuentro todos los operadores de justicia expondrán sus limitantes para realizar en mejor forma su labor.

Autores

ElHeraldo.hn