Pasar al contenido principal

ES / EN

Presidente de Colombia cree que fin del conflicto armado está cerca
Jueves, Noviembre 24, 2011 - 17:11

El productor sudamericano de petróleo, café y minería ha estado inmerso en un combate violento a grupos guerrilleros, paramilitares de ultraderecha y cárteles de narcotraficantes.

Bogotá. Colombia está cerca de ver el fin del conflicto armado interno de casi cinco décadas si sigue la ofensiva militar contra la debilitada guerrilla izquierdista o si los rebeldes se abren a un acuerdo de paz, dijo este jueves el presidente Juan Manuel Santos.

El productor sudamericano de petróleo, café y minería ha estado inmerso en un combate violento a grupos guerrilleros, paramilitares de ultraderecha y cárteles de narcotraficantes que ha cobrado miles de vidas y llevó a intensos operativos militares especiales apoyados por Estados Unidos.

"La fase final de este conflicto, que llevamos casi 50 años, se acerca. Se acerca si perseveramos, se acerca si continuamos teniendo los éxitos que se han logrado acumular a través de todos estos años", dijo el presidente en un acto de graduación de altos oficiales de las Fuerzas Armadas.

El gobierno de Santos, que a inicios de noviembre asestó el golpe más fuerte en su historia a la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) con la muerte del que fuera su máximo comandante Alfonso Cano, mantiene una política de zanahoria y garrote frente a los rebeldes.

El medio de la ofensiva contra la guerrilla iniciada por el anterior gobierno de Alvaro Uribe han muerto importantes líderes rebeldes y miles de combatientes han desertado. Después del golpe más reciente, Santos pidió a las FARC desmovilizarse.

Pero el grupo rebelde visto por Estados Unidos y Europa como terrorista rechazó esa posibilidad y anunció la continuidad de su lucha armada, aunque sin descartar una negociación de paz. Poco después nombró a Rodrigo Londoño -alias Timoleón Jiménez o "Timochenko"- como su nuevo jefe.

La llave de la paz. Santos exige a las FARC suspender sus ataques, liberar a los secuestrados y anunciar su disposición a avanzar con sinceridad a una negociación como condiciones previas para iniciar un diálogo.

"Están debilitados pero hay que ser conscientes de que no están derrotados todavía, por eso hay que perseverar. Pero como en todo conflicto siempre tiene que haber una salida", afirmó el presidente.

"Las puertas a sentarnos a encontrar esa salida no están cerradas con llave y la llave no está en el fondo del mar (...) Si el día de mañana se dan cuenta y dan las señales y las demostraciones para no volver a engañar al pueblo colombiano, el Estado colombiano no tendrá ningún problema en sentarse a buscar esa salida", precisó.

Santos reiteró que de persistir en la lucha armada, el único futuro que les espera a los comandantes guerrilleros es una cárcel o una tumba.

Las más recientes conversaciones de paz en Colombia se dieron entre 1998 y el 2002, durante el gobierno del ex presidente Andrés Pastrana, pero fracasaron.

Las FARC, que pasaron de tener unos 17.000 combatientes en el 2000 a unos 8.000 en la actualidad, insisten en imponer un sistema socialista en el país con marcadas diferencias entre ricos y pobres.

El país ha visto un crecimiento sostenido de su economía por un auge de la inversión en los sectores petrolero y minero.

Autores

Reuters