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PRI retoma riendas de México pero sin carta blanca
Lunes, Julio 2, 2012 - 18:01

Peña Nieto llega al poder con una economía que no logra ganar vuelo mientras el país lucha contra la violencia narco que deja miles de muertos cada año.

México DF. El presidente electo de México, Enrique Peña Nieto, dijo este lunes que negociará con partidos rivales para poder concretar su programa de reformas estructurales antes de asumir en diciembre, tras haber obtenido un triunfo más estrecho de lo esperado que limitó su margen de maniobra en el Congreso.

Peña Nieto, surgido de la vieja guardia del PRI pero que busca acabar con los fantasmas de corrupción y autoritarismo del pasado, llega al poder con una economía que no logra ganar vuelo mientras México lucha contra la violencia narco que deja miles de muertos cada año.

Con el 95,73% de las casillas contadas, Peña Nieto se imponía en las elecciones celebradas el domingo con el 38,04% de los votos por sobre el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, que sumaba el 31,71% de los sufragios. En tercer lugar, se ubicaba la oficialista Josefina Vázquez Mota con 25.44%.

Pero el triunfo del telegénico abogado de 45 años no fue tan holgado como anticipaban los sondeos y el partido que gobernó con mano firme entre 1929 y el 2000 no conseguiría la mayoría absoluta en el Congreso como para empujar sus propuestas sin tener que seducir a otros partidos, según proyecciones privadas y fuentes electorales.

La aptitud negociadora de Peña Nieto se pondrá a prueba en los próximos seis meses.

"Estoy en el ánimo (...) de sentarme con el presidente de la República a hablar ya sobre la transición y la integración de equipos que vayan trabajando y eventualmente hablar de lo que se pudiera impulsar antes de que llegue yo a la presidencia de la República, impulsar algunas reformas", dijo Peña Nieto este lunes a corresponsales extranjeros.

En su agenda hay otras propuestas que anticipan ser más ríspidas, como una reforma fiscal para impulsar la recaudación de México -una de las más bajas de América Latina en relación al Producto Interno Bruto (PIB) debido a la gran evasión- eliminando exenciones impositivas, o la apertura de la petrolera estatal Pemex al capital privado.

Además propone crear una gendarmería para frenar la sangre derramada por la violencia de las drogas que, desde que el gobierno del presidente Felipe Calderón lanzó al Ejército a las calles contra los cárteles, ha dejado más de 55.000 muertos.

"Desde nuestro punto de vista, los resultados electorales no significan un retorno del viejo PRI: el entorno político hoy es diferente. EPN (Enrique Peña Nieto) tendrá que trabajar con gobernadores independiente y negociar con un espectro de dinámicas diferentes en el Congreso", dijo Barclays en un reporte.

Izquierdista aún no reconoce derrota. La izquierda aparece como el probable mayor dolor de cabeza en el Congreso para Peña Nieto, quien se mostró dispuesto a dialogar tanto con el PAN como con el PRD sobre las reformas.

López Obrador, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), aún no reconoció su derrota, argumentando que los datos de su partido no se condecían con los oficiales. Se espera que el izquierdista hable a las 18 horas local (23:00 GMT).

En el 2006 perdió frente a Calderón por un estrecho margen, y tras denunciar que le habían robado la elección, convocó a protestas multitudinarias y bloqueó durante meses avenidas centrales de Ciudad de México, en un escándalo político que golpeó su popularidad.

"Vamos a esperarnos a que tengamos los resultados definitivos" que comienzan el miércoles, dijo López Obrador ante sus seguidores en la medianoche del domingo. "Todavía no está dicha la última palabra", agregó.

En la Cámara de Diputados, la encuestadora Consulta Mitofsky dijo el PRI habría obtenido entre 221 y 249 asientos con los resultados del domingo. La alianza de izquierda habría logrado entre 116 y 148 legisladores, y el oficialismo entre 115 y 135. Para tener mayoría absoluta necesita al menos 251 bancas.

La situación es similar en el Senado. El PRI habría conseguido entre 58 y 61 escaños, el PAN entre 35 y 38 y la alianza izquierdista entre 29 y 33. Se necesitan 65 senadores para tener una mayoría absoluta.

En las seis elecciones para gobernadores que se realizaron simultáneamente con la presidencial, el PRI arrebató al PAN bastiones importantes como el occidental Jalisco, mientras que el PRD mantuvo la alcaldía de la capital.

Según datos preliminares, la agrupación de López Obrador habría quitado el estado de Tabasco al PRI y el de Morelos al

PAN. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llamó a Peña para felicitarlo por su victoria y prometió colaborar con el próximo gobierno.

"El presidente (Obama) reiteró su compromiso de trabajar en colaboración con México, y avanzar en metas comunes incluyendo el impulso a la democracia, la prosperidad económica y la seguridad en la región y en todo el mundo globo, en los próximos años", dijo la Casa Blanca en un comunicado.

Mercado optimista. El mercado cambiario recibió con optimismo el triunfo de Peña, que era la apuesta de muchos inversionistas. El peso mexicano operaba estable, pero influenciado principalmente por el malhumor de los mercados externos.

Los inversionistas esperan que Peña mantenga la estabilidad macroeconómica, pese a que el partido está asociado con algunas de las peores crisis de la historia de México.

"Peña Nieto hizo campaña sobre la base de pasar reformas cruciales sobre el mercado laboral, Pemex y el sistema tributario, con lo que el resultado podría encontrar optimismo en el mercado", dijo Capital Economics en un reporte.

Aunque el PRI sentó los pilares del México moderno durante sus gobiernos ininterrumpidos -con los que dominó la vida política por siete décadas- ha sido acusado de corrupción, fraude electoral y de acallar voces opositoras.

Ahora Peña Nieto asegura que su partido, un verdadero camaleón en el que conviven corrientes de derecha e izquierda, se modernizó, aprendió de sus errores y está listo para tomar al toro por los cuernos.

"Somos una nueva generación, no hay regreso al pasado. Mi gobierno tendrá puesta su visión en el futuro, en el México de grandeza y esperanza que todos queremos", dijo Peña Nieto ante sus seguidores el domingo por la noche.

Sin embargo, recientes escándalos de corrupción o de supuestos lazos con el crimen organizado que salpicaron al menos a tres ex gobernadores del PRI hacen dudar a muchos de que la agrupación haya perdido los viejos vicios.

"El próximo presidente se debe comprometer con la educación y sobre todo, frenar la tremenda inseguridad que nos ahoga a los mexicanos", dijo Marcos Tello, un empleado de 19 años que trabaja en una maquiladora de la ciudad de Reynosa, fronteriza con Texas.

"La gente de esta frontera ya está cansada de extorsiones, secuestros, cuotas y derramamiento de sangre", concluyó.

Autores

Reuters