Hace diez días que en Brasil se convocan marchas para llamar a nuevas elecciones después de la destitución de Dilma Roussef.

Los partidos, sindicatos y movimientos sociales que se oponen al presidente brasileño, Michel Temer, se movilizaron este domingo (10.09.2016) en Sao Paulo, llegando a unos 50.000 participantes, en la que es hasta ahora, la mayor protesta organizada contra el nuevo Gobierno.

Los protestantes convocados por el Frente Pueblo Sin Miedo, marcharon para exigir la anticipación de las elecciones presidenciales de 2018 después que la presidenta Dilma Rousseff fuera destituida de su cargo por el Senado. Los manifestante marcharon hasta el Monumento a las Banderas, en el Parque de Ibirapuera y ya por la noche, fueron animados por músicos que también han expresado su rechazo al actual Gobierno.

Pese a que los opositores a Temer han organizado manifestaciones en Sao Paulo prácticamente todos los días desde que el 31 de agosto pasado el Senado destituyó a la presidenta Dilma Rousseff, ésta es la primera vez que consiguen una movilización tan expresiva y el claro apoyo de los ahora partidos opositores.

Los manifestantes se concentraron en la céntrica Avenida Paulista, corazón financiero de la mayor ciudad brasileña, ocupando todas las pistas de la vía a lo largo de dos cuadras, para reclamar contra las reformas a la legislación laboral y al sistema de pensiones anunciadas por Temer, que según los manifestantes suprimirán numerosos derechos y conquistas sociales.

A diferencia de las marchas realizadas la semana pasada, esta vez la masiva protesta terminó sin incidentes violentos, por lo que la policía no tuvo que intervenir con elementos disuasivos.