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Sobrinos de primera dama venezolana se declaran no culpables en EE.UU. por cargos de narcotráfico
Jueves, Diciembre 17, 2015 - 16:09

Franqui Francisco Flores de Freitas, de 30 años, y Efraín Antonio Campo Flores, de 29, presentaron sus declaraciones en una corte federal en Manhattan, cinco semanas después de que fueron arrestados en Haití.

Nueva York. Dos sobrinos de la primera dama de Venezuela se declararon no culpables el jueves en una corte federal en la que enfrentan cargos de conspirar para importar cocaína a Estados Unidos.

Franqui Francisco Flores de Freitas, de 30 años, y Efraín Antonio Campo Flores, de 29, presentaron sus declaraciones en una corte federal en Manhattan, cinco semanas después de que fueron arrestados en Haití.

Su caso es el más reciente de una serie de acciones presentadas por autoridades estadounidenses que vinculan a individuos conectados con el Gobierno venezolano con el tráfico de drogas.

Fuentes dijeron que ambos son sobrinos de Cilia Flores, esposa del presidente Nicolás Maduro.

Según una fuente estadounidense, los dos sobrinos se reunieron con un informante de la Administración de Control de Drogas (DEA, por su sigla en inglés) en Honduras en octubre y le pidieron ayuda para enviar 800 kilos de cocaína a Estados Unidos a través del aeropuerto local de Roatán.

Según la acusación, los dos también participaron ese mes en reuniones en Venezuela relacionadas con un cargamento de cocaína que debía enviarse a Estados Unidos vía Honduras.

Los fiscales también planean presentar cargos por tráfico de drogas contra Néstor Reverol, jefe de la Guardia Nacional de Venezuela, y Edylberto Molina, actualmente agregado militar de la embajada venezolana en Alemania, dijeron personas familiarizadas con el asunto.

El Departamento de Estado de Estados Unidos ha dicho que más de la mitad de la cocaína producida en la vecina Colombia es traficada a través de Venezuela hacia mercados en Europa y Estados Unidos.

Maduro insiste que los cargos de tráfico de drogas contra funcionarios son parte de una campaña internacional de la derecha para desacreditar al socialismo en Venezuela.

Autores

Reuters