El índice bursátil de referencia de Tailandia ha bajado un 17% durante el año, después de haber sufrido salidas extranjeras todos los meses hasta agosto, con un aumento del 5% en los mercados asiáticos.
Una venta masiva del baht tailandés, las acciones de bajo rendimiento y la presión en el mercado de bonos reflejan la creciente preocupación de los inversores globales por la inestabilidad política y las perspectivas de crecimiento en la segunda economía más grande del sudeste asiático, dicen analistas y administradores de fondos.
Tailandia sufrió su contracción económica más profunda en dos décadas el último trimestre y se avecina un largo camino hacia la recuperación a medida que la pandemia de COVID-19 ha golpeado su industria turística principal.
Al mismo tiempo, el gobierno se enfrenta a un movimiento de protesta estudiantil que está cobrando impulso y perturbando su agenda política por la sorpresiva renuncia del ministro de Finanzas, Predee Daochai, el martes, después de menos de un mes en el cargo.
"Creo que ningún otro país tiene estos dos o tres problemas al mismo tiempo, como si la situación del COVID-19 no fuera lo suficientemente mala", dijo Howie Lee, economista del OCBC Bank.
El primer ministro Prayuth Chan-ocha ha dicho que la salida de Predee, por razones de salud, no afectará los planes económicos, pero no esbozó un cronograma para el nombramiento de un nuevo ministro.
El baht cayó y ha caído un 0,6% frente al dólar desde el martes en las noticias, su caída de dos días más pronunciada en unas dos semanas. Ahora se encuentra donde cotizaba en junio a pesar de una caída del dólar en los últimos meses.
El índice bursátil de referencia de Tailandia ha bajado un 17% durante el año, después de haber sufrido salidas extranjeras todos los meses hasta agosto, con un aumento del 5% en los mercados asiáticos.
“Los únicos extranjeros que quedan en la renta variable tailandesa son realmente los inversores pasivos, los ETF y los fondos que rastrean el índice. Los administradores activos se han ido ”, dijo Jeep Chatikavanij, fundador del Ton Poh Fund, que administra 150 millones de dólares.
Una venta masiva global de bonos gubernamentales a más largo plazo también ha afectado a Tailandia con más fuerza que en otros lugares, ya que los inversores luchan por digerir las grandes ventas de deuda que están pagando el gasto de los gobiernos.
La ampliación de los diferenciales crediticios corporativos, a medida que los inversores exigen una prima mayor por prestar a las empresas tailandesas, también muestra un riesgo de incumplimiento progresivo, dijo el director de Economía de la ASEAN de BNP Paribas, Arup Raha.
“Con la inflación general siendo negativa durante varios meses, el crecimiento de los ingresos es bajo. Eso está causando cierto estrés en el sector empresarial ".
