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Preparan lugar para el regreso de "Solitario Jorge" embalsamado a Galápagos
Lunes, Octubre 20, 2014 - 09:32

Tortuga gigante que vivió un siglo y fue el útimo ejemplar de su especie requiere un espacio en la isla ecuatoriana con las más altas condiciones para que el cuerpo permanezca incólume por mucho tiempo.

Jorge "El Solitario", un ejemplar de tortuga gigante fallecido en 2012 y que fue el último de su especie, tendrá un lugar destacado en las islas Galápagos, donde vivió casi un siglo y se constituyó en un icono de la conservación de ese paradisíaco archipiélago ecuatoriano, declarado Patrimonio de la Humanidad.

Así lo señala Arturo Izurieta, director del Parque Nacional Galápagos (PNG), quien también confía en que la ciencia pueda darle a Jorge una posibilidad para revertir la extinción de su especie: la chelonoidis abingdoni, que habitó en la isla Pinta.

Lo primero es preparar el lugar donde el cuerpo de "El solitario" se exhiba en la sede del PNG, ubicado en Puerto Ayora, en la Isla Santa Cruz, donde el quelonio vivió en cautiverio tras ser rescatado hace cuarenta años de Pinta como único sobreviviente de su familia.

El cuerpo embalsamado de Jorge va a ir donde "siempre se pensó que debía ser su morada", aunque la adecuación para que se conserve por muchos años "va a tomar su tiempo", comenta Izurieta.

El PNG dispone un proyecto de construcción de la morada, cuyos planos y diseño se han modificado "con las especificaciones técnicas que hemos obtenidos del Museo Americano de Historia Natural", donde Jorge fue embalsamado.

El director del lugar explica que se realiza la readecuación de la casona de tortugas, "que es uno de los cinco segmentos de visita del circuito bautizado como Fausto Llerena, el nombre del guardaparque más antiguo del PNG y que cuidó al 'Solitario Jorge' por casi cuatro décadas".

Lo que se busca con las adecuaciones es alcanzar "las más altas condiciones" para que el cuerpo permanezca incólume por "muchísimo tiempo".

Las condiciones ambientales deben ser óptimas y, por ello, la morada debe tener una temperatura estable de unos 70 grados fahrenheit o 21 grados centígrados. La humedad relativa del sitio, en tanto, debe permanecer entre el 30% y 40% y no se puede permitir que los rayos ultravioleta del sol lleguen a la piel de la tortuga.

Paralelamente a la adecuación de la morada de Jorge, el PNG, una entidad adscrita al ministerio de Ambiente de Ecuador, continúa con estudios que permitan recuperar la especie chelonoidis abingdoni.

Esas investigaciones arrancaron en 2007 y desde entonces se han tomado muestras de tejidos de 1.726 tortugas que habitan en la Isla Isabela, la más grande del archipiélago, específicamente del volcán Wolf que se levanta en el norte de esa formación.

"Se tomaron muestras de sangre para realizar estudios que nos permitan ver cuál es la proximidad de ese material" con las características genéticas de Jorge, explicó Izurieta, tras destacar que algunos resultados de esa investigaciones son "interesantes".

Lo más importante, en todo caso, es que el cuerpo de Jorge vuelva a su terruño, porque su imagen representa mucho para el archipiélago, para el país y el mundo.

Jorge "representa los valores que tiene la naturaleza y el respeto que deben tener los seres humanos con el ambiente", indica Izurieta.

 

Autores

EFE/ LifeStyle.com