Los brasileños cambian su dieta: la lasaña supera a la feijoada.
La feijoada, la famosa combinación de arroz, frijoles y carne de cerdo, todo espolvoreado con farofa, ya no está a la cabeza de las preferencias alimentarias de los brasileños. Éstos, al igual que Garfield –el gato del comic creado por Jim Davis–, han puesto el amor de sus papilas gustativas en la lasaña. Así lo afirma un estudio global sobre alimentación encargado por Oxfam. La encuesta, realizada por la consultora GlobeScan, entrevistó a 16.000 personas en 17 países, y reveló que las masas encabezan la lista de la mayoría de los alimentos populares en el mundo.
En cuanto a la lasaña, Seara –la compañía de alimentos de Marfrig– puede dar fe de su boom brasileño: tiene seis variedades congeladas de ella. La más elegida es la versión a la boloñesa, con un 60% de las ventas. Eso en el segmento de alimentos preparados que crece a una tasa promedio del 15% por año.
De acuerdo con Antonio Zambelli, director de marketing de la compañía, la lasaña congelada es la estrella de Seara, ya que es uno de los platos más engorrosos para ser preparados en casa. Eliminando esta posibilidad, su producto, asegura, “es la opción más parecida a la que se puede obtener en un restaurante”.
Para él, el siguiente paso en la industria de platos preparados de Brasil, es desarrollar otro producto que tenga tanto éxito como la lasaña. “Es un reto no sólo de marketing, sino mejoras en la tecnología para ofrecer un plato con un sabor más parecido a lo que las personas conocen y aprecian”, dice. Pero el trabajo de Oxfam mostró también un costado más amargo: el 54% de los encuestados dijo no ingerir la misma comida que hace dos años y el 39%, que la razón del cambio era el aumento del valor de los alimentos.