Separar las finanzas del negocio con las personales y presupuestar las prestaciones son clave para el buen funcionamiento de un negocio.
El reciente estudio realizado por el área de Consumo Inteligente de MasterCard arrojó que el 53% de los jóvenes entre 18-34 años tiene como meta algún día formar su propio Negocio.
"Este sentido de iniciativa y espíritu de emprendimiento es algo para ser admirado – ya que muchos emprendedores son responsables de impulsar ideas nuevas e iniciativas innovadoras", comentó Sofía Macías, consultora de MasterCard para la región de LAC.
Así y bajo el marco de la celebración del Global Money Week, semana donde entidades promueven crear conciencia sobre el dinero, MasterCard brinda 7 consejos financieros para aquellos jóvenes que tienen en mente emprender:
1. Ahorrar antes de iniciar. Como en los primeros meses de emprender no tendrás ingresos fijos es importante que tengas ahorrado para que puedas solventar tus gastos durante ese periodo.
2. Separar las finanzas del negocio con las personales. Muchos emprendedores cometen el error de mezclar las finanzas del negocio con las suyas, lo que complica enormemente la administración e incluso puede propiciar que tomes utilidades que deberías reinvertir para gastos personales. Para evitar esto y es importante que te asignes un sueldo y no dispongas más dinero que el asignado.
3. Tener cuidado con el “efecto tijera”. En ocasiones realizamos desembolsos para generar el producto o servicio de nuestro negocio mucho antes de que lleguen los ingresos y si no tenemos con qué fondear ese período podemos quedarnos sin flujos para operar, ése es el famoso "efecto tijera". Éste también se puede dar porque nos paguen a 30, 60 0 90 días nuestros clientes o haya cuentas incobrables y no lo tengamos previstos. Manejar los flujos, estacionalidad y cobranza del negocio y tener un fondo de emergencias es básico para no detener su operación.
4. Presupuestar tus prestaciones. Para las finanzas sanas de un emprendedor es fundamental tener gastos médicos, vacaciones y aguinaldo (es la paga de fin de año, no sé si es el mismo nombre en Chile). Tómalos en cuenta en las cuentas que hagas.
5. Mantener las deudas bajo control. No quieras comprar todo en un sólo momento, has una lista de prioridades y, conforme va caminando tu negocio, adquiere lo que necesitas y sé puntual en tus pagos para tener un buen historial crediticio.
6. Manejar cuidadosamente los impuestos, tanto en tus costeos como en la operación. Algunos emprendedores olvidan incluir en sus costos los impuestos y en ocasiones eso puede achicar sus márgenes o incluso dejarlos en números rojos. Antes de poner el precio de venta hay que incluir los impuestos y siempre reservar el dinero para pagarlos en cuanto cobramos para evitar contratiempos.
7. Invertir en tu educación tanto para mejorar tus negocios como para aprovechar sus frutos y generar un patrimonio. Así como hay que buscar herramientas para mejorar nuestras habilidades de negocios, también hay que hacerlo para nuestra educación financiera: aprender a ahorrar en cuanto recibimos las ganancias, hacer presupuestos, generar fondo de emergencia, usar el crédito responsablemente, manejar nuestros riesgos y familiarizarnos con la inversión es básico para la estabilidad y supervivencia a largo plazo de nuestro negocio.
