Cuando se derrumbó la presa murieron 19 personas y el lodo y los residuos tóxicos de la mina se vertieron en el río Doce, arrasando pueblos, contaminando las reservas de agua y llegando al océano Atlántico. Hoy, ambos gigantes mineros debaten quién debe pagar por los daños.
Gracias por suscribirte a nuestro newsletter. Por favor, llena los siguientes datos para poder ofrecerte información de mejor manera.