Un panel integrado por representantes del sector privado, sindical y gubernamental analizó la importancia de generar nuevos líderes.

ElObservador.com.uy. "Que la gente que esté en puestos de liderazgo sea capaz, hace la diferencia", expresó el decano del IEEM –Escuela de Negocios de la Universidad de Montevideo- Pablo Regent, durante la presentación del Programa Líderes de Impacto Global (PLIG), que tiene como objetivo desarrollar a jóvenes líderes con experiencia en política, el sector público, el sector privado y la sociedad civil.

Para presentar el programa, un panel de líderes de diferentes sectores brindaron su visión sobre la importancia de generar ámbitos para que los jóvenes se formen en esta materia. Las exposiciones se centraron fundamentalmente en la poca participación de los jóvenes en ámbitos de liderazgo político.

El director del Instituto Nacional de la Juventud (Inju), Federico Barreto, comentó que Uruguay "es un país bastante hostil con las juventudes", especialmente en la política, ya que las opiniones se toman como válidas después de que una persona llega a la edad de 50 o 60 años. "Eso en otros países no pasa, y es importante cambiar esta realidad en Uruguay", agregó.

Por otra parte, el presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, contó su experiencia participando en un programa denominado "Pro Líderes" durante su juventud, intercambiando visiones con personas del sector privado, público y del cooperativismo, entre otros, algo que dijo que lo ayudó a "dialogar sin tantos prejuicios".

Coincidió con Barreto en el problema de los pocos líderes jóvenes que pueden encontrarse en el país. "Yo fui dirigente sindical a los 21 años, y eso ahora es impensado que suceda", comentó. Para eso, dijo Pereira, hay un momento en que las poblaciones más "veteranas" deben "correrse y dejar el lugar a los que vienen, y eso sucede en todos los campos: en el sindical, en el empresarial y en el político", indicó.

Pereira cuestionó a quienes dicen que los jóvenes "no militan", sino que lo hacen de una manera diferente a su época. "Los que juntan plata para organizaciones de construcción de casas, están militando; militar no es solo lo que yo creía de tipos con barba y creer que la revolución se va a hacer en 15 minutos", comentó entre risas.

Adaptarse a los cambios con diálogo

Los cambios en el mundo del trabajo no estuvieron exentos de la conferencia. El presidente de la Asociación Rural del Uruguay (ARU), Pablo Zerbino, comentó que los líderes deben estar preparados para adaptarse a los cambios, y en el proceso de transformación tecnológica, la participación público-privada es fundamental. "Yo trabajé en el INIA (Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria), representando a la ARU, y me di cuenta que hay que tener cabeza abierta y cooperar", expresó.

Mientras tanto, Pereira dijo que "hay que reaccionar" a los cambios en el mundo del trabajo. "Hay que pensar el trabajo y la educación de la mano, no pueden separarse porque una cosa va ligada a la otra". Además, agregó que para construir "un país de calidad" "los actores tienen que cruzarse, pero sin muchos prejuicios".

"Hay muchos temas importantes para el país en los que se puede llegar a un consenso mediante el diálogo, como la educación, las nuevas tecnologías, la competitividad y la productividad", resumió, y agregó: "Nosotros no le tenemos miedo a la palabra productividad, pero para eso las empresas tienen que ser reales en cómo se muestran".

Sobre el programa

El Programa Líderes de Impacto Global va dirigido a profesionales universitarios de entre 24 y 30 años, con un año como mínimo de experiencia laboral, que deberán pasar por un proceso de admisión y 24 de ellos serán seleccionados por un comité.

Los interesados deben postularse vía web, en donde se puede encontrar toda la información sobre el programa, docentes y costos del mismo.

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