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El desafío "verde" del sector inmobiliario
Vie, 03/05/2013 - 09:55

Ariel Rappaport

El desafío "verde" del sector inmobiliario
Ariel Rappaport

Ariel Rappaport es gerente inmobiliario de Ralei Grupo Inmobiliario.

Uno de los grandes cambios culturales vistos recientemente en Chile es la mayor conciencia ciudadana por el cuidado del medioambiente. El deseo de disfrutar de un medio libre de contaminación y con espacios para desarrollar una vida saludable, tomó un interés prioritario y se nota en quienes habitan la ciudad.

Sin embargo, la preocupación no es suficiente. Así lo revela el reciente estudio desarrollado por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), pues las ciudades de nuestro país padecen de un déficit de áreas verdes. La OCDE concluyó que los chilenos disponemos de sólo 4,1 metros cuadrados de áreas verdes por persona, cuando la recomendación de la Organización Mundial de la Salud es de 9 metros cuadrados por habitante.

Estudios como este plantean un desafío importante a la industria inmobiliaria, que implica construir no sólo viviendas, sino entornos amigables con la calidad de vida de quienes las habitan.

El acceso a espacios que comprendan metros cuadrados de naturaleza se hace indispensable, más aún cuando descubrimos que además de un parque automotor que crece a pasos agigantados, según el mismo estudio, el Gran Santiago cuenta con apenas 3,46 metros cuadrados de áreas verdes por persona.

Por cierto que los cambios se desarrollarán paulatinamente. Pero una forma de avanzar es promoviendo el uso racional de los recursos en los inmuebles, a su vez que se desarrollan espacios para la vida sana y el deporte.

En ese sentido, es indispensable que todos los actores de la industria inmobiliaria incorporen innovaciones tecnológicas en favor de lo expuesto. El resguardo del medioambiente no es sólo un problema de las autoridades, requiere la atención de todos. El sector puede y debe ser protagonista de primer orden. Recordemos que la protección del medioambiente debe partir por casa, maximizando sus beneficios de habitabilidad y vida saludable.

Sin que nadie lo exija, ¿por qué no incluir "puntos verdes" en los edificios? ¿O crear espacios inteligentes acorde a la vida urbana, como más metros para estacionar bicicletas y disponer de bicicletas para favorecer su uso como medio de transporte en la ciudad? Es hora de abordar el desafío.

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