Pasar al contenido principal

ES / EN

Los conflictos mineros dan un impulso al cobre
Mié, 01/02/2017 - 10:09

Ole Hansen

Por qué los americanos pagarán más por conducir y comer este verano
Ole Hansen

Ole Hansen es vicepresidente de Saxo Bank. Es especialista en la negociación de Futuros, con especial hincapié en Materias Primas. Con anterioridad, trabajó 15 años en Londres, más recientemente para un fondo de cobertura de multiactivos de futuros y divisas donde dirigía el equipo para la ejecución de operaciones.

El aumento del riesgo de interrupciones en el suministro de dos de las minas de cobre más grandes del mundo ha apoyado una recuperación renovada del metal durante enero. El apoyo adicional ha provenido del aumento de los datos de inflación, así como de la debilidad del dólar tras los últimos esfuerzos de la Casa Blanca por hablar de forma condescendiente del billete verde. 

Una huelga en la mina Escondida de Chile podría comenzar el lunes. Los trabajadores de ésta, la mina de cobre más grande del mundo, de BHP Billiton, votaron a favor de una huelga tras la ruptura de las negociaciones salariales. 

Además, la segunda mina más grande del mundo, la Grasberg de Indonesia, a cargo de Freeport-McMoRan, ha visto a los suministros interrumpidos debido a una disputa actual entre los propietarios y el gobierno. 

Indonesia quiere prohibir las exportaciones de concentrado de sus minas, y en su lugar sólo permite la exportación de productos refinados. 

Estos desarrollos, junto con la promesa de inversión en infraestructura del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, han visto la demanda de inversión de metales industriales, no menos importante de cobre, calentarse durante el trimestre pasado.

Tras más de un año de operación lateral, el cobre de alta calidad (HG) se disparó al alza en noviembre último en una combinación de demanda de China y el potencial de un alza importante en la demanda por el plan de infraestructura de Trump.

En diciembre, el mercado experimentó una revisión de la realidad y devolvió cerca del 50% de sus ganancias de noviembre. Sin embargo, en enero, el enfoque cambió a las preocupaciones sobre el suministro antes mencionadas, y este martes el precio del cobre alcanzó el nivel más alto desde junio de 2015.

El año que viene podría ver incrementadas las huelgas, con cerca del 20% de la capacidad global haciendo frente la renovación de contratos, según Citibank. En total, esto podría interrumpir alrededor de un millón de toneladas de producción, o el 5% de la oferta, de acuerdo a UBS. 

La demanda especulativa de cobre se disparó al alza durante noviembre. Después de un período de toma de ganancias durante diciembre, en la semana que terminó el 24 de enero se observaron renovadas compras del metal.  

Esto llevó a la posición larga neta a un nuevo récord de 91.000 lotes, y un aumento continuado en el interés abierto del contrato de futuros desde entonces nos indica que ha aumentado aún más durante la última semana.

La perspectiva de la demanda para el cobre estaba, incluso teniendo en cuenta el potencial de aumento de la demanda de los Estados Unidos, luchando para justificar la subida de precios del año pasado. Los inventarios registrados por las tres principales bolsas en Nueva York, Londres y Shanghai han aumentado constantemente desde diciembre y actualmente se sitúan en un máximo de nueve meses. Sin embargo, con el enfoque (al menos en el corto plazo) cambiando a las preocupaciones por el suministro, el metal podía ver más subidas si las interrupciones comienzan a afectar a la oferta. 

No obstante, por ahora, el cobre HG necesita una clara ruptura por encima de US$2,74 la libra para apuntar al máximo de 2015, de US$2,95, mientras que el cobre LME ha encontrado hasta ahora resistencia en los US$6.000/ MT, un nivel psicológico importante. Los fondos de cobertura, que tienen una posición larga récord, es poco probable que se preocupen mucho por las correcciones, a menos que veamos al metal romper por debajo de US$2,63, y más importante, si lo hace al nivel de US$2,58.

La plata ha estado disfrutando el viento de cola proporcionado por el rally entre los metales industriales. Este martes rompió la resistencia anterior en US$17,32 la onza, y de este modo retrocedió la mitad del "Trump dump".

El siguiente nivel de resistencia se puede encontrar en US$17,73/oz, que es el 61,8% del retroceso de la ola de ventas posterior a la elección presidencial de los Estados Unidos, y también el 38,2% de la ola de ventas de julio a diciembre.

*Esta columna fue publicada originalmente en Sala de Inversión.

Países
Autores