El descontento del más radical "kirchnerismo" con las políticas económicas moderadas del presidente Alberto Fernández se ha acrecentado en las últimas semanas. El mandatario aún debe decidir si aceptará o no la renuncia de los ministros.

El Gobierno argentino entró en crisis este miércoles después de que varios ministros que responden al "ala dura" del oficialismo presentó su renuncia al presidente de centroizquierda Alberto Fernández, tras la estrepitosa derrota electoral que sufrió el peronismo gobernante en las primarias legislativas del domingo.

Las dimisiones, que aún deben ser aceptadas por Fernández, implican una crisis dentro de la coalición oficialista, que sufrió una paliza al obtener apenas un 30% de los votos en las primarias para las elecciones de medio término, frente a cerca del 38% de la alianza de centroderecha Juntos por el Cambio.

De repetirse el resultado en los comicios legislativos de noviembre, el Gobierno perdería el control del Congreso.

Medios locales han informado en las últimas semanas sobre el creciente descontento del más radical "kirchnerismo" con las políticas económicas moderadas de Fernández.

El presidente estuvo reunido en la tarde del miércoles con los ministros leales, que salieron a manifestarle públicamente su apoyo, para analizar los pasos a seguir y definir si acepta las renuncias. También salieron a apoyarlo intendentes.

"Todo mi apoyo a @alferedez (Alberto Fernández), síntesis de la unidad popular para lograr el país que queremos", dijo en Twitter la ministra de Seguridad, Sabrina Frederic.

"Mi total e incondicional apoyo al Presidente Alberto Fernández por todo lo que representó como la síntesis de lo que votó el pueblo en 2019", afirmó Claudio Moroni, ministro de Trabajo, en un comunicado difundido a través de su portavoz.

Más temprano, el ministro de Interior, Eduardo De Pedro; el de Cultura, Tristán Bauer; el de Ambiente, Juan Cabandié, y el de Ciencia y Tecnología, Roberto Salvarezza, son algunos de los funcionarios que presentaron su dimisión, según portavoces del Gobierno y de la coalición gobernante Frente de Todos.

"Escuchando sus palabras del domingo por la noche, donde planteó la necesidad de interpretar el veredicto que ha expresado el pueblo argentino, he considerado que la mejor manera de colaborar con esa tarea es poniendo mi renuncia a su disposición", dijo De Pedro en una carta pública.

De Pedro es un enlace clave con dirigentes de todo el país y el representante principal del "kirchnerismo" dentro del Gobierno, que intentará reducir la distancia con la oposición de centroderecha en las elecciones generales de medio término.

Los demás funcionarios renunciantes también pertenecen al espacio comandado por el poderosa vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Más temprano, el presidente se mostró en un acto público con el ministro de Economía, Martín Guzmán, como señal a los mercados, que bajaron el miércoles debido a la tensión política que sufre el país sudamericano.

Aníbal Fernández, exjefe de Gabinete entre 2009 y 2011 y en 2015 durante la presidencia de Fernández de Kirchner, afirmó más tarde -luego de reunirse con el mandatario- que no había una "crisis política" y que la presentación de las renuncias era "un muy buen gesto político ".