Los diputados del MAS lograron quórum por la noche de este miércoles y votaron a Sergio Choque como presidente de la Cámara de Diputados. Su bancada en el Senado también buscaría sesionar, pero no está claro si desafiaría a la mandataria interina nombrando autoridades.

La Paz. Los partidarios del asilado líder boliviano Evo Morales intentaban retomar la iniciativa política con el nombramiento de nuevas autoridades legislativas en la madrugada de este jueves, horas después de que la oposición inició un gobierno de transición, en momentos de alta tensión en el país andino.

Los diputados del Movimiento al Socialismo (MAS) lograron quórum por la noche de este miércoles y votaron a Sergio Choque como presidente de la Cámara de Diputados. Su bancada en el Senado también buscaría sesionar, dijo una fuente a Reuters. Sin embargo, no estaba claro si desafiaría a la mandataria interina nombrando autoridades.

La presidenta en funciones, Jeanine Añez, inició su período de transición asegurando que llamaría a elecciones en el corto plazo, un día después de asumir el cargo para poner fin al vacío de poder y el caos que generó la renuncia de Morales el fin de semana.

En medio de la crisis política originada en la salida del líder indigenista bajo presión de las Fuerzas Armadas, la tensión entre sus seguidores y opositores continuaba. El miércoles, la Fiscalía General del Estado reportó siete fallecidos desde el inicio del conflicto en octubre.

"Bolivia necesita paz en este momento, no podemos seguir maltratándonos entre hermanos, matándonos entre hermanos", dijo el diputado Choque al cabo de su nombramiento al frente de la cámara. Sus declaraciones estuvieron en sintonía con el último mensaje de Morales.

En un tuit que escribió por la noche, el expresidente, que esta semana llegó a México para asilarse, pidió a otros países, a la ONU y al Papa Francisco "acompañarnos en el diálogo para pacificar nuestra querida Bolivia. La violencia atenta contra la vida y la paz social".

Los llamados a la tranquilidad se conocieron tras una jornada repleta de violencia y confusión, en la que las fuerzas de seguridad frustraron un primer intento de los legisladores del MAS para acceder al Congreso mientras Añez hablaba desde la casa de gobierno.

La mandataria provisional y el expresidente se acusan mutuamente de planear un golpe de Estado. Añez designó a su gabinete luego de que a los funcionarios que trabajaban en la anterior gestión les impidieran el ingreso a otro edificio de gobierno.

Aparte de ser opositora a Morales, Añez es cuestionada por sus partidarios porque la Asamblea Legislativa en la que asumió no reunió el quórum necesario debido a la ausencia de los legisladores leales al expresidente, que dimitió bajo una "sugerencia" de los militares.

La crisis estalló el domingo, cuando la Organización de Estados Americanos presentó un informe sobre graves irregularidades en una votación de octubre en la que Morales se había atribuido la victoria, llevando a una dimisión que puso fin a sus 13 años en el poder.