Pasar al contenido principal

ES / EN

No lo digo yo…
Mié, 18/05/2011 - 13:56

Gabriela Calderón

Cómo Irlanda sale de la recesión
Gabriela Calderón

Editora de ElCato.org y columnista del diario El Universo (Ecuador). Se graduó en 2004 con un título de Ciencias Políticas con concentración en Relaciones Internacionales de la York College of Pennsylvania. Sus artículos han sido reproducidos en otros periódicos de Latinoamérica y España como El Tiempo (Colombia), La Prensa Gráfica (El Salvador), Libertad Digital (España), El Deber (Bolivia), El Universal (Venezuela), entre otros. En 2007 obtuvo su maestría en Comercio y Política Internacional de la George Mason University.

…ni la oposición, ni la “prensa corrupta” del Ecuador, lo dice la prensa internacional:

‘Correa celebra un referéndum que le permitirá controlar la justicia’, decía El País de España a vísperas de la consulta popular. En el artículo se dice que la consulta propone “la sustitución del actual Consejo Judicial… por una comisión técnica integrada por tres delegados designados por el Ejecutivo… para que en un plazo de 18 meses reformen el sistema a la medida de Correa”. Luego de la consulta, Paúl Mena Erazo, del mismo diario, se preguntaba: De triunfar el ‘Sí’, “¿habrá espacio para los contrapesos necesarios en toda democracia?”.

La revista inglesa The Economist reportó que “los ecuatorianos votaron sobre un paquete de 4.000 palabras con diez enmiendas -fraseado con una legalidad impenetrable- que le daría al señor Correa amplios poderes nuevos sobre las cortes y la prensa”. El artículo también asevera que la propuesta de penalizar el enriquecimiento “no justificado” y de requerir que dueños de bancos y medios de comunicación se deshagan de participación en cualquier otra industria le daría al presidente “un poder nuevo para ejercer presión financiera y legal sobre sus rivales”.

Al otro lado del Atlántico, Simón Romero e Irene Caselli, del New York Times, titularon su reportaje sobre la consulta así: ‘Ecuador vota sobre propuesta para darle más poder al presidente’ y señalan que el objetivo de la consulta es darle al Ejecutivo más poder, particularmente sobre “las organizaciones independientes de prensa y el poder judicial de la nación”. Nótese que los reporteros dicen claramente que el poder lo recibiría el presidente, no una entidad impersonal como el Estado, ni siquiera el partido Alianza PAIS.

La editorial del 2 de mayo de El Comercio del Perú se tituló ‘Ecuador: los últimos días de la prensa libre’, y resumía la contienda electoral de esta forma: “El próximo sábado 7 de mayo los ecuatorianos deberán elegir entre el Sí y el No a derechos individuales y el futuro de la justicia”. El editorial del 7 de mayo de La Nación de Argentina expresaba una similar preocupación (‘Otra mordaza a la prensa ecuatoriana’). Luego están las opiniones del conocido periodista Andrés Oppenheimer (‘Ecuador va cuesta abajo’, en El Nuevo Herald), y del escritor cubano Carlos Alberto Montaner (‘Correa entre la democracia liberal y la democracia dictatorial’, Firmaspress), quienes expresaron su preocupación de que un triunfo del Sí resultaría en una coartación de libertades en Ecuador.

Desde Nueva York, hasta Londres, Lima y Buenos Aires, distintos medios de comunicación y periodistas parecen sostener una visión de lo que está pasando en Ecuador que coincide con aquella de la supuesta “prensa corrupta” de nuestro país. ¿Será que esto es una confabulación internacional en contra del “proyecto” de la “Revolución Ciudadana”? Menuda tarea la de controlar el contenido de esos medios, donde los ecuatorianos todavía podremos leer una descripción y un análisis sin censura de lo que pasa en el país.

Como un apoyo apenas mayoritario no parece detener al gobierno en su intento de acumular todavía más poder, una prensa internacional crítica tampoco lo logrará. No obstante, sí le dificultará al gobierno ecuatoriano la tarea de esconderle al mundo sus atropellos contra las libertades de los ecuatorianos.

*Esta columna fue publicada originalmente en El Universo.com.

Países