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OIT reconoce que la recuperación mundial de tasas de desempleo tras el COVID-19 es dispar entre naciones
Miércoles, Mayo 31, 2023 - 11:15
Desempleo. Foto: Andina.

La policrisis que vive la economía mundial se evidencia en el incremento en los costos de vida, la desaceleración de la economía, el aumento en los niveles de deuda y la presión por el alza en las tasas de interés. 

Pese a los estragos y paralización de actividades que causó la pandemia de Covid-19, la respuesta y recuperación del mercado laboral a esta emergencia ha sido mucho más rápida que otras crisis que ha vivido la economía global en el pasado, reconoció la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

“La recuperación mundial de las tasas de desempleo tras la crisis de la Covid-19 ha sido notablemente rápida en comparación con crisis anteriores, tales como la crisis financiera mundial de 2008-2009”, se destaca en la nueva edición del Observatorio de la OIT sobre el mundo del trabajo difundida este miércoles.

El organismo revisó a la baja sus expectativas para el desempleo a nivel global y destacó que se espera que a lo largo de este año se logre regresar a los niveles prepandemia, con una tasa de desocupación de 5,3%, debido a una “resiliencia mayor a la esperada del mercado laboral de los países de ingreso alto frente a la desaceleración económica”.

Sin embargo, este avance ha sido dispar entre naciones, lo que ha acrecentado la desigualdad con los países de bajos ingresos. En economías como las africanas o las de Medio Oriente, por ejemplo, se estima que la recuperación plena será después de 2023.

En el caso de México, los datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) para el primer trimestre del año muestran la recuperación total del mercado, con indicadores como la tasa de desocupación (2,6%) y la brecha laboral (17,2%) en mínimos históricos de las últimas dos décadas

Sobre la brecha laboral, medición que refleja el déficit de empleo más amplio, la OIT detalla que a nivel global ésta es de 11,7%. Pero también en su medición se refleja la disparidad entre economías, pues mientras las de bajos ingresos tienen actualmente un nivel de 21,5%, para las de ingresos medios y altos se reportan tasas de 11 y 8,2%, respectivamente.

“En 2023 se prevé que el déficit mundial de empleos se sitúe en 453 millones de personas o el 11,7%, más del doble de la cifra de desocupación. El déficit mundial de empleos de 453 millones incluye tanto los 191 millones de desempleados como otros 262 millones que desean un empleo pero no cumplen los requisitos para ser considerados desempleados”, se detalla en el informe.

Entre las personas sin trabajo, pero no clasificadas como desempleadas bajo esta medición de la OIT, se incluyen, por ejemplo, las desalentadas para buscar empleo y las que actualmente no pueden aceptar uno por las responsabilidades que tienen, tales como las tareas de cuidado o asistenciales.

Y a pesar de los avances del mercado laboral, el organismo advirtió que el escenario de “policrisis” que vive la economía global podría frenar el avance en las cifras de ocupación, principalmente por el incremento en los costos de vida, la desaceleración de la economía, el aumento en los niveles de deuda y la presión por el alza en las tasas de interés. Nuevamente, todos estos elementos también tienen un impacto diferenciado entre países de ingresos altos y bajos.

“Las conclusiones de este informe nos recuerdan con fuerza las crecientes desigualdades mundiales. Invertir en las personas a través del empleo y la protección social contribuirá a reducir la brecha entre las naciones y las personas ricas y pobres”, expresó el director general de la OIT, Gilbert F. 

Autores

El Economista