Los fiscales especiales peruanos del caso 'Lava Jato', Jorge Ramírez y Rafael Vela, han firmado en Brasil un acuerdo de cooperación con la constructora brasileña para recabar pruebas del caso.

Brasil.- "Odebrecht y el estado peruano formalizaron el acuerdo definitivo que establece las bases para la continuidad de la cooperación de la empresa con la justicia del país", comunicó después de la firma la empresa brasileña. "Este acuerdo va a permitir al sistema de justicia peruano acceder a muy valiosa información que permita esclarecer la averiguación de la verdad ante graves delitos que nuestro país ha sufrido", ha indicado el fiscal Rafael Vela, quien ha calificado la negociación como exitosa, según ha informado la agencia de noticias Andina.

El procurador 'ad hoc' del caso en Perú, Jorge Ramírez, ha señalado que otro punto clave del acuerdo es que Odebrecht deberá pagar unos US$182 millones como reparación civil a Perú. El valor se fijó en base a cuatro licitaciones que ganó la empresa brasileña en el país andino pagando sobornos a funcionarios peruanos. "Este año estaría entrando al tesoro público por concepto de pago de tributos 450 millones de soles (US$135.054 millones) más los 80 millones de soles (US$24.009 millones)que responden a la primera cuota de la reparación civil a pagarse en este año. Es decir, un total de 530 millones de soles (US$159.064 millones)", ha explicado Ramírez.

Odebrecht admitió haber pagado alrededor de US$30 millones en sobornos para obtener contratos en el país sudamericano y acordó proporcionar a los fiscales detalles sobre los pagos. La compañía ha estado involucrada en un escándalo de corrupción masivo que se ha extendido en América Latina. En 2016, reconoció en un acuerdo que había sobornado a funcionarios en una docena de países para obtener contratos de obras públicas.

Después de Brasil, Perú es el país donde ha sido más alcance ha tenido el escándalo de Odebrecht. Los cuatro presidentes peruanos más recientes están bajo investigación en relación con supuestos sobornos de la compañía. Los proyectos involucrados en los escándalos son una línea del metro de Lima, los tramos 2 y 3 de la carretera interoceánica Sur que une a Perú con Brasil, una autopista urbana entre Lima y Callao, y una autopista en el Cusco.