Un buen video, aquel que demuestre con fidelidad las bondades de su producto o servicio, lo puede ayudar a retener a sus clientes y, por supuesto, atraer a otros nuevos. Hasta hace pocos años la producción de videos de alta calidad con fines comerciales quedaba bajo el dominio exclusivo de las grandes compañías, mientras que las pequeñas y medianas observaban a lo lejos, como un sueño lejano. Hoy la tecnología brinda oportunidades y posibilidades también a las PyMEs, gracias al fácil acceso a cámaras y plataformas de edición y distribución que permiten producir videos de calidad profesional a bajo costo. Y hacer que lleguen a millones de personas.

Aquí presentamos una breve guía para usar el recurso de video online con éxito:

1) Tener en claro el objetivo

Para empezar a pensar en el video, primero hay que definir lo que se quiere lograr y comunicar: retomar antiguos clientes mediante una promoción, mejorar el servicio a los clientes actuales respondiendo sus preguntas más frecuentes, atraer otros nuevos mediante la presentación de recomendaciones para utilizar el producto o servicio, etc.

Si usted se pregunta lo que quiere lograr en el video, la respuesta le ayudará a entender lo que tiene que comunicar. Hay que comenzar este reto empresarial resumiendo el objetivo de manera clara y en una sola línea.

2) Escriba un guión

Después de concentrarse en la necesidad de la empresa, no se apresure ni desperdicie recursos valiosos. Tómese un  tiempo para refinar el concepto del video o, en otras palabras, tome un lápiz y papel y escriba un guión. La mejor manera es dibujar dos columnas diferentes: por un lado, ubicar los textos (no importa si serán leídos a cámara o en off o bien presentados como títulos en pantalla) y en la otra columna indicar las imágenes o secuencias correspondientes, que acompañarán esos textos.

Pero lo más importante es que el guión debe reflejar profesionalismo, demostrar que está escrito por personas que conocen su negocio. Por último corrobore que el texto resuma lo que quiere expresar.

3) Manos a la obra: la producción

Y ahora viene la parte más entretenida: la producción. Si usted tiene los recursos para contratar a una productora profesional, deberá serles claro sobre los lineamientos estéticos del video y sobre cómo quiere se presente su producto o servicio. Para evitar malentendidos y perder tiempo valioso, puede aportarles videos similares al que pretende, para que guíen a la productora.

Latinoamérica es un territorio rico en productores independientes y en la red encontrará cientos de miles de sus videos de todos los matices.  Un ejemplo notable es el del videobloguero chileno, Germán Garmendia, quien con su canal “Hola Soy Germán” ha conseguido más de 18 millones de suscriptores en YouTube, convirtiéndose en el segundo canal más popular y superando a estrellas consagradas como Rihanna y One Direction. Las PyMEs, en este terreno, no se quedan atrás: IPETH, un terciario en fisioterapia que tiene campus en México DF, Puebla y Guatemala, cuenta  con más de un centenar de videos en su canal de YouTube que suman más de 500 mil vistas. Ejemplos como estos se multiplican en la red, especialmente en los canales de YouTube que son prolíficos en la materia y están segmentados según temáticas, lo que le ayudará a encontrar modelos de referencia.

Ahora bien, si usted decide encarar la producción del video por su cuenta, debe conseguir una cámara que pueda producir videos de alta calidad. Las cámara de teléfonos celulares, cámaras réflex con video o cualquier otra pueden hacer el trabajo, pero recuerde que debe elegir la más alta resolución disponible en el dispositivo. En YouTube puede encontrar una gran cantidad de videos de capacitación para las personas que deseen grabar videos profesionales por su cuenta. Los espectadores apreciarán si usted se toma el tiempo en la búsqueda de una buena ubicación, la fotografía, la iluminación adecuada, el fondo y el maquillaje, sin olvidar una adecuada vestimenta.

4) Encontrar la plataforma más apropiada

¿El vídeo está listo? ¡Felicitaciones! Ahora es el momento de encontrarle la plataforma adecuada. Si el video busca combinar negocios y difusión en las redes sociales, YouTube es, probablemente, la alternativa más indicada. La mayoría de las plataformas permiten agregar información adicional como el título de video, palabras clave y categoría. Invierta tiempo y reflexión en el posicionamiento del video y la combinación de palabras en el título descriptivo.

Después de haber decidido si va a subir el vídeo a YouTube u otra plataforma, debe abrir una cuenta de usuario para comenzar a construir su reputación. Es recomendable que no utilice una cuenta personal, sino que cree una específica: si en una etapa posterior, suma otros videos y forma un canal que los agrupe, otro empleado de su negocio podrá manejarlo sin interferir con su materiales personales.

5) Distribuir el contenido inteligentemente

Cien horas de video son subidas a YouTube cada minuto. Esto indica que el suyo debe destacarse, por lo que debe pensar cuidadosamente en los canales de distribución. En primer lugar, combine sus activos en ofertas basadas en la nube: sitio web de negocios, distribución de boletines y otras redes sociales. Pero las empresas que quieran crecer tendrán que pensar en nuevos circuitos: por ejemplo, si los bloggers que cubren el campo de la actividad de su empresa tienen un interés público, comparta el video con ellos para que llegue a más personas.

Las herramientas están a su disposición, son gratuitas y cada vez más fáciles de usar. Sólo resta tomar la decisión, pensar, escribir y con ello abordar su próximo proyecto de fin de semana. Cientos de miles, entre ellos probablemente su competencia, ya lo hicieron ¿Qué más va a esperar?