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¿Por qué a los ejecutivos empresariales les importa el cambio climático?
Dom, 05/10/2014 - 15:17

Jim Yong Kim

Luchar contra la pobreza en medio de la incertidumbre mundial
Jim Yong Kim

Jim Yong Kim es presidente del Grupo Banco Mundial.

Durante los últimos meses, he oído a los líderes empresariales referirse al impacto que el cambio climático podría tener en sus industrias y en los bienes y servicios de los que todos dependemos. Puede que no hablen mucho de ello públicamente, pero están muy conscientes de los riesgos que conlleva un planeta más cálido para sus cadenas de suministro, fábricas y la fuerza laboral.

La pérdida del suministro de agua es una gran amenaza que se cierne, no solo para las empresas de bebidas, sino que también para los productores de energía, para las industrias que necesitan enfriar equipos y para toda la cadena de suministro de alimentos cuando los agricultores deben enfrentar precipitaciones menos predecibles o la ausencia total de lluvias. Si el abastecimiento de agua es muy bajo o las temperaturas se elevan demasiado, eso también afecta la salud y la productividad de los trabajadores. Los efectos repercuten a lo largo de toda la cadena de suministro.

Es interesante ver cómo los directivos empresariales están encontrando oportunidades a pesar de las condiciones difíciles.

La empresa de software de negocios SAP (i) transformó una investigación sobre los modos de reducir su propio consumo de energía, los costos relacionados y las consecuencias para el medio ambiente en nuevos sistemas que ayudan a sus clientes a realizar evaluaciones similares para bajar los costos.

Por su parte, la multinacional de energía Alstom ha invertido en innovación para ayudar a que sus industrias se adapten y disminuyan las emisiones. Está trabajando en tecnologías de captura y almacenamiento de carbono que permitan impedir la liberación de gases de efecto invernadero a la atmósfera. En tanto, Enel, GDF Suez y otras importantes empresas del sector energético están invirtiendo en energía renovable con bajo nivel de emisiones de carbono para satisfacer las necesidades de sus clientes en el presente y en el futuro.

Estas y otras compañías están demandando cada vez más políticas coherentes que puedan respaldar la innovación en aras de un futuro con menos contaminación. Se han unido a centenares de otras firmas para declarar su apoyo a la fijación del precio del carbono, antes de la Cumbre sobre el Clima convocada por el secretario general de las Naciones Unidas.

Esto es importante. Los gobiernos no pueden solucionar la crisis del clima por sí solos. Se necesita la inversión y la innovación del sector privado, ya que es lo que puede aumentar la eficiencia de las antiguas tecnologías y permitir dar un salto a opciones nuevas, mejores y más limpias.

Las corporaciones también necesitan el apoyo de los gobiernos en este frente. El precio del carbono proporciona la certidumbre política que los líderes empresariales requieren para revaluar la eficiencia y cambiar sus prioridades con vistas a un crecimiento más limpio. Es el caso de Microsoft, que descubrió eso cuando creó un precio “sombra” que imita la fijación del precio del carbono.

El “precio del carbono” interno de Microsoft está ayudando a las unidades de la empresa a centrarse en la eficiencia energética y ahorrar dinero. Más de 150 corporaciones importantes aplican en la actualidad políticas internas de precios del carbono dentro de su proceso de toma de decisiones con el fin de tener un panorama más claro de sus riesgos y encontrar oportunidades de negocios.

Las empresas nos dicen que están buscando coherencia en las políticas y flexibilidad en la manera de reducir las emisiones. Las políticas de fijación del precio del carbono les permiten innovar y encontrar las soluciones más acertadas para sus industrias.

Fundamentalmente, fijar el precio del carbono permite que las fuentes de las emisiones se hagan responsables de los costos de los daños, los cuales hoy en día recaen en todos nosotros bajo la forma de costos en la salud pública y perjuicios ocasionados por las tormentas y las temperaturas extremas. Este cambio abre una puerta a alternativas más limpias y saludables.

El cambio climático es un desafío mundial en una escala que la humanidad nunca ha visto. Nos afecta a todos. Todos tenemos oportunidades -y una responsabilidad con las generaciones futuras-de hacer algo respecto de este tema. Es interesante ver que las empresas están tomando la iniciativa.

*Esta columna fue publicada originalmente en la zona de blogs del sitio web del Banco Mundial.

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