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Cómo la tecnología inteligente mejora la productividad
Lun, 27/08/2018 - 09:32

Rubén Belluomo

Diez maneras en que el smartphone cambió nuestras vidas y la industria
Rubén Belluomo

Rubén Belluomo es gerente comercial de Infor Cono Sur.

Seguramente muchos ya han escuchado sobre las predicciones que afirman que los  sistemas, productos, y la maquinaria inteligente, transformarán el mercado. La tecnología basada en sensores promete lograr el uso de miles de datos contextuales en una enorme variedad de aplicaciones, desde el análisis predictivo hasta el mantenimiento automático de maquinaria. Estos beneficios generan mucho entusiasmo, pero más allá de la novedad, la tecnología inteligente se ocupa de temas fundamentales de las empresas como la productividad, la eficiencia y el servicio al cliente.

Las iniciativas de tecnología digital y del Internet de las Cosas (IoT) frecuentemente ponen el foco en sectores donde el retorno de la inversión es vago y no es fácil de definir. En este sentido, las empresas también deberían considerar la aplicación más básica, ya que brinda un retorno de la inversión más rápido y será la base para un esfuerzo mayor a largo plazo. Los beneficios pueden seguirse a través de las etapas de transformación, lo que ayuda a contar con una visión positiva del proyecto.

Respuestas y Percepciones. El aumento de la productividad con el IoT puede ser tan simple como permitir a los trabajadores contar con un fácil acceso a los datos, de manera que puedan tomar decisiones bien informadas en tiempo real y no en estimados o en hojas de cálculo con varios días de antigüedad. Los gerentes pueden ser estratégicos y los usuarios de primera línea pueden ser eficientes. Así también, los distintas áreas pueden ver cómo su rol impacta en la rentabilidad. De esta manera, cuando las máquinas, departamentos, sistemas, empleados y proveedores están todos conectados, el personal puede tener una imagen más completa y luego ver los detalles de algún incidente en particular.   

El equipo funcionando. Los procesos en las plantas también pueden optimizarse con la tecnología inteligente. Sensores enfocados en la maquinaria de la planta permiten al equipo de mantenimiento monitorear el estado de ella y automatizar el mantenimiento preventivo. Por ejemplo, los sensores pueden programarse para monitorear condiciones de temperatura, vibración y presión, que son las primeras señales de algún problema. Así si se alcanzan los puntos establecidos, las alertas pueden enviarse al equipo de mantenimiento para que éste intervenga  evitando tiempo de paradas inesperadas.

Mantenimiento del inventario. Capturar, monitorear y analizar los datos sobre el mantenimiento y las reparaciones ayudará a las empresas, especialmente las de manufactura, a predecir exactamente qué repuestos son necesarios, cuándo y dónde. Esta predicción evita la redundancia en el inventario ahorrando fondos, los que son fundamentales en empresas donde los componentes son caros. Poder eliminar el inventario “por si acaso” libera el capital para otras inversiones

Seguimiento de la ubicación. El uso de sensores y el seguimiento por GPS en el almacén, con equipo de manejo de materiales y flotas de vehículos, brinda un rápido ROI. Saber exactamente dónde se encuentran físicamente los productos y los vehículos, incluso las personas, es un enorme beneficio que logra ahorros. El inventario y los envíos serán mucho más precisos. Además, la capacidad de ubicar y seguir a los vehículos de entrega, ayuda al armado de ruta de los despachos y a predecir el horario de entrega. De esta manera, los datos confiables eliminan las discrepancias y mejoran la productividad.

Las tecnologías inteligentes brindan muchos beneficios que logran optimizar la productividad, refuerzan el valor práctico y la eficiencia, permitiendo de esta forma un ROI más rápido. Los éxitos a corto plazo podrán ser el inicio para mayores inversiones, desarrollando así una base fuerte mejorar las operaciones.

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