¿Cómo trabajan los profesionales de la salud en España en torno a la ablación?
Asha Ismail tenía solo cinco años cuando le practicaron la mutilación genital femenina (MGF). Ocurrió en Moyale, un pueblo en la frontera entre Etiopía y Kenia. Fue su propia madre quien la acompañó a casa de su abuela, donde les esperaba una curandera. Entre las mujeres habían cavado un hoyo en el suelo de barro de la cocina para que se tumbase dentro y allí se lo hicieron, sin personal médico ni anestesia.